Pidieron la absolución para el acusado por el crimen del mecánico

La fiscalía solicitó la absolución para Julián Ignacio Robles por el homicidio de Diego Litarowicz, pero pidió la condena de 8 años y seis meses por otro hecho.

Este miércoles se llevaron a cabo los alegatos del juicio contra Julián Ignacio Robles, imputado por el crimen de Diego Litarowicz, el mecánico asesinado durante un intento de robo en diciembre de 2016 en la localidad de San José. El proceso comenzó el 30 de agosto y el próximo martes, el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) de Lomas de Zamora dará a conocer el veredicto.

La fiscalía, a cargo de Walter Disteffano, solicitó que se absuelva al imputado de la  acusación de “homicidio en ocasión de robo y criminis causa” por el asesinato de Litarowicz. En segundo lugar, pidió que sea condenado a la pena de 8 años y seis meses de cárcel al considerarlo “autor penalmente responsable del delito de homicidio simple en grado de tentativa doblemente agravado por ser en poblado y en banda y por el empleo de arma de fuego y la portación ilegal de arma de guerra”, por otro hecho ocurrido el 30 de diciembre de 2016.

“No quedó acreditada la participación en la muerte de Litarowicz, razón por la cual esta fiscalía desiste de ese delito que le fuera imputado”, precisó ante el presidente del Tribunal, Pedro Dardo Pianta. “Entiendo que después de escuchar los testimonios de la familia Litarowicz, quienes negaron que el imputado haya participado del hecho, quedó acreditado que no estuvo en la escena del crimen, así como los demás testigos, que tampoco lo citaron”, detalló.

Pianta recordó que durante su testimonio, la hermana y la madre de la víctima indicaron conocer a Robles, a quien apuntaron como “un pibe terrible” en el barrio, pero que “solo robaba celulares”. “En su testimonio, las mujeres precisaron que Diego, cuando estaba internado, aseguraba que quien le disparó fue una mujer”, agregó.

Por su parte, al abogado defensor García Agnone adhirió al pedido absolutorio de la fiscalía.

Familia Litarowicz

En dialogo con Info Región, Karina Litarowicz, hermana de “el Rulo”, sostuvo que “Robles no lo mató”. “Como se dice habitualmente, Robles era un ladrón de gallinas y no se dedicaba al robo de autos. Él no fue”, aseguró, al tiempo que planteó que ahora la investigación vuelve a foja cero. “Ojalá que sigan buscando y los agarren”, concluyó.

La otra acusación

El otro hecho que se le imputa a Robles, ocurrió durante la madrugada del 30 de diciembre de ese año, cuando habría baleado y robado la moto a un joven identificado como Ricardo Morinigo, quien declaró antes de los alegatos de hoy.

“Julián me salió con un revólver y me tiró dos tiros en la moto. Ahí aceleré, pero otro que estaba junto a él me dio un cascotazo en la cabeza. Me caí y me levanté para correr y me siguió tirando. Al quinto disparo, siento un fuerte golpe en la espalda. Me había pegado un tiro”, relató el testigo, quien contó cómo tres personas (entre ellas reconoció a Robles) le robaron la moto y las zapatillas “a culatazos en la cara”.

Según advirtió el fiscal, durante su detención, la Policía secuestró un arma calibre 22 que sería el revolver con el que le habrían disparado a Morinigo.

García Agnone consideró que “no existen elementos suficientes para dar un veredicto condenatorio”, dado que según su exposición, “sólo hubo un testigo que lo sindicó y éste cayó en numerosas contradicciones en su relato”.

“Entiendo que el oscuro testimonio de Morinigo no puede ser salvamento suficiente para dar veredicto condenatorio a mi defendido, razón por la cual voy a solicitar la absolución de los delitos que se le acusa por parte de la fiscalía”, sostuvo el representante de la defensa, que solicitó que se valoren como atenuantes a la hora de la sentencia “la carencia de procesos condenatorios y el buen concepto vecinal que se presume de Robles”. “En caso de que se lo considere culpable del delito de portación de arma de guerra y de arma de fuego civil, se lo condene a la pena de 3 años y seis meses de prisión”, concluyó.