Tejido y solidaridad para ayudar a bebés que nacieron prematuros

La ONG Okakuaa realiza elementos para estimular a los pequeños que luchan por sobrevivir. ¿De qué se trata? ¿Cómo ayudar?

La ONG Okakuaa nació hace dos años con un único motivo: estimular a los bebés prematuros. Y desde ese entonces, usan sus manos y sus corazones para realizar “Okakuaas”, una suerte de pulpitos que ayudan a la estimulación de los bebés que luchan por sobrevivir.

Juana, la impulsora de esta iniciativa, advierte que “la solidaridad no es dar lo que a uno le sobra sino que es hacer algo por el otro y para el otro”. Y en ese marco surgió el emprendimiento. 

Cuando todo comenzó, Juana se acercó a hablar con la Jefa de Neonatología del hospital Luisa C. de Gandulfo porque quería ayudar a “los bebitos prematuros”. “Yo quería aportar un elemento de estimulación que cumpliese con todo lo que se pudiera dentro de lo que me iba informando la doctora”, relató la mujer. 

La propuesta fue muy bien recibida por el hospital y así surgió Okakuaa que, según indicó Juana, significa “crecer”. El elemento de estimulación, al que llaman de la misma manera que a la ONG cuenta con cinco raíces de diferentes colores tejidas a crochet y un par de alas de la parte trasera: “Raíces para crecer y alitas para volar”, describió Juana. 

En la actualidad, la organización trabaja en coordinación con la Secretaría de Salud del Municipio de Lomas de Zamora para entregar los elementos de estimulación en todos los hospitales del distrito que cuenten con un ala de neonatología.

“El Okakuaa necesita estar lavado a 60 grados para que se destiña todo lo que se pueda y se descontamine y en la etapa final los deben esterilizar en el hospital”, advirtió la mujer. Y valoró que produce “confort además de estimulación, porque al ser tan chiquito busca apego y por su condición no pueden ser abrazados por su mamá”.

El proyecto, según explicó su impulsora, “fue creciendo poco a poco” y actualmente cuenta con 17 personas en la comisión de la organización y “muchísimos voluntarios que se suman a colaborar”. En esta línea, la mujer expresó la emoción que le provoca poder realizar esta tarea y aseguró que se trata de “una caricia al alma” al mismo tiempo que invitó a que quien desee hacerlo se sume a la iniciativa que “está abierta para todos”, concluyó. 

¿Cómo sumarse?

Además de poder contactar a la organización por Facebook los integrantes y voluntarios de la ONG se reúnen el último sábado de cada mes en el Centro Cultural El Ceibo de Banfield y los segundos sábados en la Delegación de Llavallol. Las reuniones, según explicó Juana, son para “distribuir las tareas y ver si alguien se quiere sumar”.