Que Banfield y Julio César Falcioni tiene una relación interminable es sabido, pero un cáncer de laringe distanció al entrenador de su cargo en el Taladro y ahora, ya recuperado, tendrá la oportunidad de cumplir su cuarto ciclo en reemplazo de Hernán Crespo, quien no obtuvo los mejores resultados y debió irse tras 15 partidos.
La situación en la que el Emperador se hará cargo del plantel no es la mejor, ya que luego de un comienzo de temporada en la Superliga que no fue el deseado, la institución cayó en zona complicada en cuanto al descenso, por lo que sumar y engrosar los promedios serán los desafíos para el ídolo banfileño.
La vuelta
Pese a demostrar en cancha ideas ofensivas y de buen trato con la pelota, el equipo de Crespo no encontró las victorias y sobre todo pecó con la falta de gol. Quedarán las demostraciones con River, en el campeonato anterior (igualdad 1-1), y la derrota injusta con Boca (0-1) en el vigente certamen, como las muestras de un equipo que intentó, mereció y no pudo en un ambiente exitista que necesita constantes resultados.
Con la salida ya consumada y una actualidad que coquetea con el descenso, desde la dirigencia del Taladro fueron a la carta segura y el Emperador les dio el sí. Es que Falcioni tiene el respaldo de la gente y la jerarquía para encarar un proceso que será complejo.
En principio, sin confirmación oficial, se espera la presentación el viernes en el Campo de Deportes de Luis Guillón y la firma de un contrato hasta el 2020 como encargado de la dirección técnica, ya que en otro momento se especuló con el ofrecimiento que hizo la comisión directiva para que el ex entrenador de Boca sea el manager del club.
El campeonato
La fecha de amistosos del seleccionado ante Chile y México le proponen un parate a la Superliga que Banfield podrá aprovechar para trabajar con el flamante cuerpo técnico. En cuanto al retorno a las canchas será como local de Talleres de Córdoba, plan que oficia de oportunidad para dejar atrás el empate sin goles ante Defensa y Justicia.
