El Gobierno repudió dichos de diplomático de EEUU y amenazó con sanciones


“La Argentina ha honrado todos sus compromisos en tiempo y forma en las condiciones que lo ha acordado en el 2005 y el 2010 y lo seguirá haciendo”, le remarcó el canciller a Sullivan, quien es el encargado de negocios de los Estados Unidos y está a cargo interinamente de la Embajada estadounidense en Argentina.

"Es importante que la Argentina salga del default lo antes posible para poder retornar a la senda del crecimiento económico sustentable y atraer la inversión que necesita", había expresado el diplomático estadounidense y se había mostrado escéptico sobre la iniciativa de Argentina y el G77 + China en la ONU sobre reestructuraciones de deudas soberanas.

"Argentina no tiene deudas". En la reunión, Timerman recalcó que "el propio gobierno norteamericano conoce las consecuencias perversas de la sentencia del juez Griesa, tal como expresó en abril de 2012 en su presentación como amicus curiae de la República Argentina, cuando sostuvo que la interpretación de la cláusula pari passu puede permitir que un solo acreedor frustre la implementación de un plan de reestructuración con apoyo internacional”.

"La Argentina no tiene deudas en cesación de pagos con Estados Unidos ni con ningún otro país. Muy por el contrario, con fecha 30 de julio del corriente año el país ha erogado el primer vencimiento del acuerdo firmado con los países miembro del Club de Paris por un importe de 642 millones de dólares. Por lo tanto los dichos sobre un supuesto default no tienen ningún asidero fáctico, sino que coinciden con la postura de los fondos buitre en contraposición con los intereses del 92.4% de los acreedores que han aceptado la reestructuración de la deuda”, enfatizó.

El canciller le advirtió también al diplomático que “parece ignorar la Ley 26.984 del Pago Soberano Local de la Deuda Exterior de la República Argentina aprobada por el Parlamento argentino en la cual se contempla el pago al 100% de los acreedores. Dicha ley debió ser sancionada para subsanar la situación creada por la incumplible sentencia de un juez de Nueva York que impide el cobro a los acreedores que aceptaron los canjes realizados en el 2005 y 2010”.

Sanciones. Finalmente, el canciller Timerman le aseguró que de repetirse este tipo de intromisiones en los asuntos internos de la República Argentina se adoptarán las más severas medidas estipuladas en la Convención de Viena sobre la conducta de los representantes diplomáticos.