El Milrayitas coronó una gran campaña con el regreso a la B Nacional


Los hinchas de Los Andes que estuvieron en el decisivo partido del miércoles hicieron que el estadio Eduardo Gallardón delirase de felicidad y los que siguieron las instancias por la televisión y la radio extendieron el eco por todo Lomas de Zamora.

El Milrayitas derrotó en el último partido del torneo a Almagro y así logró el ascenso a la Primera B Nacional al haber finalizado primero en la Zona B. Así, regresa a la antesala de la Primera División tras cinco años.

Se trató del décimo ascenso de Los Andes en su historia y el séptimo a la segunda categoría, tras los de 1938, 1943, 1957, 1986, 1994, 2000 y 2008.

El logro obtenido es producto de un proceso llevado adelante con trabajo y coherencia. El aplomo dirigencial se tradujo en la ratificación de un cuerpo técnico y un plantel que respondió con una campaña que habla por sí misma: once triunfos, ocho empates y solo una derrota. Además, fue el equipo que más goles convirtió (29) y el que menos recibió (12).

La Comisión Directiva se mantuvo en el camino que había iniciado la temporada pasada, el cuerpo técnico trabajó en cada detalle, los jugadores tuvieron empeño en cada partido y la gente no dejó de acompañar al equipo. El resultado de tal conjunción fue el merecido ascenso.

Otro punto destacado fue que Fabián Nardozza mantuvo casi siempre el mismo equipo titular: Maximiliano Gagliardo (disputó 19 de los 20 encuentros); Emmanuel Martínez (19), Maximiliano García (18), Daniel Franco (17), Maximiliano Barreiro (14); Diego Galeano (17), Fernando Lorefice (18), Luis Zeballos (18), Diego Cisterna (19); Ricardo Vera (19) y Alejandro Noriega (19).

El máximo anotador del Milrayitas fue Noriega con 11 gritos. En el cruce definitorio con Almagro logró reivindicarse con dos tantos, luego de haber errado un penal en el último minuto del empate 1-1 con Sportivo Italiano: “La clave está en el grupo humano de compañeros de trabajo con el que cuento. Cuando terminó ese partido, todos me vinieron a abrazar y me acompañaron en ese momento. Además, la gente me bancó mucho a través de las redes sociales y todo esto no tiene precio”, agradeció el goleador.

El delantero arribó a Lomas de Zamora como cuarto atacante y a fuerza de buenas actuaciones se adueñó del puesto. Pese a que suena su nombre en varios equipos, pretende quedarse: “Siempre están los que te van llamando, pero hoy estoy acá, tengo contrato y quiero disfrutar de todo esto. Cuando llegué a este club dije que era un sueño jugar en Los Andes. Espero quedarme en el club para el Nacional B”, agregó Noriega, en diálogo con Info Región.

Gagliardo fue otro de los pilares principales que tuvo Los Andes en esta consagración. Protagonizó intervenciones espectaculares, de esas que valen tanto como un gol. Fue el arquero que menos goles recibió y en diez encuentros mantuvo la valla en cero.

“Me gusta mucho todo esto, me siento parte importante de este logro, ayudando desde donde me tocó estar. Siempre traté de dar lo mejor y ahora hay que disfrutar de este hermoso premio”, indicó el ex Atlanta, en una charla con este medio.

Lorefice fue el jugador que manejó a todo el equipo desde la mitad de la cancha. Con la cinta de capitán en su brazo, el mediocampista tuvo un campeonato de gran nivel, ya que ayudó tanto en la recuperación del balón como a la hora de generar juego y convertir goles importantes, como el que significó el empate con Acassuso.

“Todo esto es algo único, inexplicable, hace muchos años que Los Andes quería subir y lo logramos con un equipo muy humilde, trabajador y un gran cuerpo técnico, por eso tenemos tanta alegría”, comentó.

El volante central estuvo a punto de irse a mitad de año pero decidió quedarse con el objetivo de lograr el ascenso: “Haber mantenido la base del torneo anterior fue la clave, la humildad del grupo también es muy importante y por eso culminamos el torneo con este triunfo. Cuando renové el contrato lo hice con la idea de que continúe gran parte del plantel y conseguir este objetivo, porque sino se hace muy complicado”.

“Desde lo personal, estoy muy contento; tenía una responsabilidad muy grande y lo que logré me genera mucha satisfacción. Ascender con esta institución es algo único. No somos conscientes de lo que logramos. Estamos todos con las revoluciones al máximo, pero seguramente con el correr de los días vamos a caer y darnos cuenta de lo que conseguimos”, señaló.

Y concluyó: “Uno siempre sueña con conseguir cosas importantes, pero es difícil. En la previa sabíamos que era un torneo muy complicado, que tuvo varias fechas seguidas, pero demostramos tener mucho fútbol y se ganó”.

Detrás de un gran objetivo y con empuje colectivo, Los Andes logró algo que había perseguido durante cinco años. El miércoles las frustraciones quedaron atrás y desde entonces solo es tiempo de alegría para la institución de de Lomas de Zamora. El Milrayitas es otra vez nacional y el club lomense se prepara para recorrer el país en un nuevo desafío.

Por Santiago Coni