Avanza el juicio y se complica la situación de Santillán


La segunda audiencia del juicio a Martín Santillán por la muerte de Fátima Catán se realizó ayer en el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 4 del Departamento Judicial de Lomas de Zamora. En esta ocasión declararon más testigos de la querella y un policía.

A partir de los dichos del entorno de la víctima, la situación de Santillán -que llega acusado de “homicidio en el contexto de violencia familiar”- se complica. Es que se ahondó en la presunta situación de violencia de género en la que estaba inmersa Fátima.

Los testimonios. Ludmila González, amiga y compañera de trabajo de Fátima, dejó en evidencia que el imputado era “una persona celosa, que no la dejaba ponerse determinada ropa o maquillarse”. “Una vez, le vimos moretones (a Fátima), y después de mucho insistirle, se puso a llorar y nos contó que Martín le había pegado”, agregó.

“Ella esperaba a que termine con los golpes, con nuestro círculo de amigos le habíamos aconsejado que lo deje, pero ella creía que todo iba a mejorar”, señaló, para luego enmarcar que Fátima “siempre planeó formar una familia pero él no quería tener hijos”.

Manuel Nicanor Reynoso, conocido de la mamá de Fátima, también declaró. Afirmó que la víctima le contó que su concubino “la golpeaba”. “Fui a buscar el colchón y ropa a la casa en que convivía con Santillán, 15 días antes del incidente; me dijo que se llevaba las cosas y se separaba”, expuso Reynoso.

La palabra del policía. Horacio Videla es un policía que cuatro meses antes del hecho que terminó con la vida de la joven, había ido a la casa de Fátima por denuncias de violencia familiar y planteó que la segunda vez que acudió, faltaban elementos de la vivienda.

“Lo que me llamó la atención la primera vez que fui fue la cantidad de aparatos electrónicos que había en la casa. Había cámaras dentro y fuera del monoambiente. La segunda vez que fui, no estaban las cámaras ni los aparatos electrónicos”, recordó el efectivo que acudió a la vivienda de Catán y Santillán para “tomar prendas de ella” para los peritajes. “Santillán me dijo que se los había llevado el hermano (a los aparatos) porque tenía miedo de que le robaran”, añadió Videla.

Vale recordar en este punto que Jesús, el padre de la joven fallecida, había advertido que la familia Santillán se había “llevado cosas de la casa”.

Próximas audiencias. Se realizará hoy la tercera audiencia. Se espera que declaren más testigos de la querella y luego será el turno de la defensa.

El caso. Fátima Catan murió el 23 de agosto de 2010 luego de haber permanecido internada cinco días en el hospital del Quemado de La Plata, donde fue derivada desde el hospital Evita de Lanús. La joven fue rociada con alcohol y prendida fuego en su casa de Villa Fiorito, en un confuso episodio.