En los Tribunales de Lomas de Zamora se reanudará hoy el juicio a Martín Santillán, único imputado por el asesinato de quien fuera su pareja, Fátima Catán, en 2010. En la que será la cuarta audiencia, declararán un testigo de los tres presentados por la querella y unos diez dispuestos por la defensa. Comenzará a las 10 en el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 4 de ese Departamento Judicial.
Santillán está imputado bajo la carátula de “homicidio en el contexto de violencia familiar” y las declaraciones de las dos últimas audiencias complicaron su situación, tras ser descrito como “una persona celosa” que, en ocasiones, “golpeó” a su concubina.
“Esperamos que digan la verdad”. Con respecto a las declaraciones que darán los diez testigos dispuestos por la defensa, el hermano de la víctima, Nahuel Catán, destacó en diálogo con Info Región la importancia de que no falseen su testimonio.
“Se supone que esta es una de las últimas instancias. Las declaraciones que realizaron mi papá y Videla fueron bastante certeras”, alegó Catán en referencia al testimonio brindado por el padre de la víctima y el policía Horacio Videla, quien cuatro meses antes del hecho había concurrido a la casa de la pareja por un llamado que alertaba sobre violencia familiar y presentó su testimonio durante la segunda audiencia del caso.
Sobre la culpabilidad de Santillán, Catán afirmó: “El abogado dice que no cree que haya vuelta atrás por todo lo que hizo”. “Ya está más que comprobado”, sentenció.
El testimonio de la querella. Además de los diez testigos que presentará la defensa del acusado, se espera la presencia de uno de los vecinos que dijeron escuchar gritos de la víctima el día del hecho.
"Esperamos el testimonio de vecinos de la pareja que siempre escuchaban las peleas y que el día del hecho escucharon una fuerte discusión, que Fátima gritaba 'me quemo' y luego un gran silencio", manifestó el abogado que representa a la familia de la víctima en el juicio, Gabriel Juricich.
"También falta que declare el jefe de Fátima, quien la veía con marcas de golpes y mantuvo conversaciones con ella para que dejara a Santillán", dijo Juricich, quien agregó que hasta el momento "todos (los testigos que declararon en el juicio) confirmaron que había actos de agresión física".
El caso. El crimen por el que se juzga a Santillán ocurrió el 18 de agosto de 2010, cuando la pareja se encontraba en su vivienda de Murature 1628, en Villa Fiorito.
Aparentemente, mantuvieron una discusión durante la cual ella sufrió quemaduras en su cuerpo que le provocaron la muerte tres días después.
La versión del imputado es que la joven tenía en su mano una botella que contenía alcohol porque estaba limpiando discos compactos y se prendió fuego cuando encendió un cigarrillo, a pesar de que él se arrojó sobre su cuerpo con intenciones de apagar las llamas.
Sin embargo, los peritos de la Policía Federal que intervinieron en la instrucción de la causa descartaron esa hipótesis por el lugar donde presentaba las quemaduras la joven y dijeron que el imputado sólo se quemó una mano.
Además, los investigadores creen que el lugar donde se registró el hecho fue alterado y que el imputado o sus familiares se llevaron una cámara de seguridad que funcionaba en la casa de la pareja.
Declaran nuevos testigos en el juicio por el crimen de Fátima
