Una nueva jornada fallida se vivió en el Tribunal Oral en lo Criminal Nº4 de Lomas de Zamora. La audiencia prevista para las 10 pero comenzó a las 12 y fue interrumpida por un inconveniente de salud que sufrió Elsa Gerez, madre de la víctima y particular damnificado. Sin presencia de la querella, no pudo continuar el debate.
Sin testigos clave. La Justicia no pudo dar con los dos vecinos de Fátima, por lo que no prestarán declaración en el debate. “Nos dieron un número de radio que no existe. En los domicilios que declararon no encontraron a nadie; es todo muy raro, porque ellos anteriormente habían declarado”, manifestó en diálogo con Info Región Gabriel Juricich, abogado querellante.
El letrado agregó que sus palabras hubieran sido “de vital importancia”. “Ellos escucharon los gritos desde dos lugares diferentes. Habían escuchado que ella le pedía ayuda y un montón de cosas que se van a incorporar por lectura, aunque hubiera sido ideal que puedan declarar”, indicó.
Cabe destacar que en la audiencia realizada la semana pasada, se esperaba por la presencia de estas dos personas y no fueron encontradas, por lo que la audiencia duró menos de 10 minutos.
La escena del crimen. La querella sostiene que la actuación del fiscal que anteriormente entendía en la causa fue “nefasta”. Tal como lo afirmaron en sus testimonios Nahuel Catán y Jesús Catán, hermano y padre de Fátima respectivamente, Juricich coincidió en que la casa fue “limpiada” luego del hecho. “Había una cámara que tiene todo registrado y desapareció. Tampoco había nada quemado, estaba todo ordenado, y no encontraron el encendedor ni el alcohol, todo desapareció. El fiscal de ese momento debió mandar a custodiar la escena”, aseguró, y recalcó la importancia de la computadora. “Todos coincidieron en que había una cámara que filmaba todo y un monitor en el cual se veía, pero en la casa no se pudieron encontrar”, sostuvo.
La próxima audiencia. Se realizará el 18 de marzo. El juicio continuará con la declaración de los testigos presentados por la defensa de Martín Santillán, único imputado. Según sus familiares, serán cinco.
La salud de Santillán. En un principio, la audiencia corrió riesgo de realizarse ya que el acusado padece de algunos dolores que, según informaron desde el TOC 4, “son provocados por una úlcera sangrante”. El juez dispuso que sea trasladado a la Unida de Pronta Atención (UPA), situada sobre Camino Negro, para determinar su estado y el tratamiento al que debe someterse.
Finalmente, los testigos clave no declararán en el juicio
