Caso Catán: pidieron penas de 22 y 25 años para Santillán


En el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 4 del Departamento Judicial de Lomas de Zamora se desarrolló ayer la audiencia de lectura de alegatos en el juicio a Martín Santillán, único acusado por la muerte de Fátima Catán. La joven, que era su pareja, falleció en 2010 luego de ser prendida fuego en su casa de Villa Fiorito.

Tras haber sido pospuesta la semana pasada, en la audiencia de ayer se expusieron los pedidos de condena de las partes: la querella pidió 25 años de prisión, mientras que la fiscalía solicitó 22. La defensa de Santillán, en tanto, pidió la absolución del imputado y el reconocimiento de inocencia por parte del juez.

La fiscal Viviana Simone pidió que se condene a Santillán bajo la carátula de "homicidio simple" de su pareja, mientras que los abogados del particular damnificado requirieron al juez que considere como agravante la “alevosía” del hecho.

En su alocución, el abogado de la familia Catán, Gabriel Juricich, sostuvo que los peritos desecharon la versión de Santillán que afirma que Fátima se roció con alcohol y se prendió fuego cuando, accidentalmente, accionó el encendedor que tenía en la mano izquierda mientras limpiaba cd’s de música con alcohol.

Según el letrado, los especialistas cubrieron un maniquí con piel de cerdo y le acercaron un encendedor prendido luego de haberlo rociado con alcohol. De esa manera, confirmaron que la única forma de que se prendiera fuego era con el contacto directo.

Para reforzar su posición, Juricich planteó la hipótesis de que Santillán “imitó” la metodología empleada por el ex baterista de Callejeros Eduardo Vázquez, quien incineró a su pareja Wanda Taddei en febrero de 2010. Sostuvo que incluso la “perfeccionó”, ya que a Fátima “la quemó en un 85 por ciento”.

Además, sostuvo que en ambos casos la única forma que encontraron los hombres de cortar el vínculo con sus parejas fue “terminando con su vida” y que ambos ejercían un “mecanismo de dominio” sobre ellas, debido a la diferencia de edad.



Últimas palabras. Minutos antes de finalizar la audiencia, el Juez le ofreció al imputado la posibilidad de decir unas últimas palabras antes de la sentencia, que se conocerá el miércoles. “Soy inocente de lo que se me está acusando”, exclamó Santillán, cabizbajo.



El caso. Fátima Catán estaba embarazada de dos meses y convivía en Villa Fiorito con su pareja, Martín Santillán. El 23 de agosto de 2010 falleció en el Hospital del Quemado, en La Plata, donde estuvo cinco días internada debido las graves y múltiples quemaduras en su cuerpo. Había sido derivada desde el hospital Evita, de Lanús.

Fue rociada con alcohol y prendida fuego. Santillán declaró que fue ella la que se prendió fuego accidentalmente, cuando limpiaba un CD con alcohol y prendió un cigarrillo. La familia denuncia, desde el primer momento, que fue un femicidio.