Lorenzetti fue ratificado como presidente de la Corte Suprema


El Centro de Información Judicial (CIJ) -portal de noticias que depende del máximo tribunal- publicó ayer un texto de 210 caracteres y sin firma en el que ratificó “las autoridades designadas mediante acordada 11 del 21 de abril de 2015”, luego de que surgieran versiones de que Lorenzetti estaba evaluando no asumir el nuevo mandato tras haber sido cuestionado.

La acordada 11, que dio a Lorenzetti la posibilidad de presidir la Corte Suprema por un cuarto período, fue cuestionada porque en uno de sus párrafos decía que había sido firmada en “la sala de acuerdos del tribunal” en presencia de todos los ministros, algo que no ocurrió porque Fayt habría firmado el documento en su casa con ayuda de uno de sus asistentes.

“La Corte Suprema de Justicia de la Nación comunica que, ante versiones publicadas en el día de la fecha, ratifica total y absolutamente las autoridades designadas mediante acordada 11 del 21 de abril de 2015”, rezó el comunicado publicado por el CIJ.

Las versiones. Las “versiones periodísticas” indicaban que Lorenzetti le había comentado a sus pares Juan Carlos Maqueda y Highton de Nolasco que, por “cansancio moral”, luego de haber sido cuestionado prefería no asumir el nuevo mandato que comenzaría en enero.

Las “versiones periodísticas” se acrecentaron luego de que el periodista de Página/12 Horacio Verbitsky manifestó el lunes que el propio titular de la Corte, mediante una carta, le adelantó "la inmerecida primicia" de que dejaría el cargo, luego de la serie de notas publicadas por ese matutino en las que se relataron las irregularidades cometidas por los ministros supremos al adelantar la reelección de Lorenzetti.

Críticas. La saga de versiones, cartas y ratificaciones se produjo luego de que distintos actores políticos y judiciales pusieran en duda la legitimidad de la nueva elección anticipada de Lorenzetti como presidente del máximo tribunal y advirtieran que pudo haberse cometido un delito en su designación.

El constitucionalista Eduardo Barcesat explicó que si se comprueba que Fayt no estuvo presente a la hora de la firma del acuerdo, tal como relató Verbitsky, constituiría una “falsedad ideológica en un instrumento público, lo que además de constituir un delito, puede derivar en la nulidad de esas resoluciones”.

Desde el punto de vista político, los cuestionamientos se enfocaron en la decisión de adelantar nueve meses la elección del presidente de la Corte.

El jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, sostuvo que la reelección anticipada del titular de la Corte “es una falta de ética total”, considerando que recién entrará en vigencia a partir del 1 de enero de 2016.

En la actualidad la Corte Suprema de Justicia se encuentra funcionando con cuatro miembros, uno menos del estipulado, y la oposición informó que no avalará la postulación de ningún candidato propuesto por el Poder Ejecutivo como fue el caso de Roberto Carlés, cuyo pliego se encuentra frenado en el Senado.