El jefe de gobierno porteño, que aspira a ocupar el Sillón de Rivadavia, dialogó con vecinos, analizó las problemáticas en el seno de los barrios y cuestionó al Ejecutivo local por la “ausencia del Estado”. Bregó, entonces, por el “cambio” para “salir del barrio que los condena a todos”.
Mauricio Macri arribó a Almirante Brown alrededor de las 16, acompañado por el precandidato a intendente del distrito por el frente Cambiemos, Carlos Regazzoni, y la fórmula macrista que competirá en las elecciones provinciales, integrada por María Eugenia Vidal y el radical Daniel Salvador.
En su visita, el precandidato a presidente dialogó con habitantes de Longchamps y recorrió las calles de la ciudad, realizando un “timbreo” por algunas casas del barrio. Más tarde, se reunió con vecinos en las instalaciones de la Unión Vecinal 9 de Julio, ubicada en San Martín 2050. Allí, el jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, entre risas y definiciones que se encuadran en la arena política, se animó a patear algunos penales con los chicos del club.
Esta visita se enmarca en la campaña electoral, de cara a las elecciones primarias que en agosto definirán al candidato de Cambiemos: Macri, Elisa Carrió o Ernesto Sanz. La semana pasada Macri había recorrido Lanús junto a Vidal y el precandidato a intendente en ese distrito, Néstor Grindetti.
La visita a los vecinos. Luego de su contacto con los vecinos y en conferencia de prensa, Macri cuestionó el Estado local y la gestión de Daniel Bolettieri. “Hoy pudimos compartir los problemas y las realidades de cada uno de los que nos abrió sus puertas y realmente sienten que hay un profundo abandono del Estado en el barrio”, señaló en diálogo con la prensa. 
“Falta presencia del Estado, hay calles de barro, no hay cloacas, faltan oportunidades de trabajo, pero la gente tiene esperanza de que se puede vivir mejor, que merece vivir mejor y apostando por el cambio que estamos construyendo entre todos”, aseveró el líder del PRO. “La gente siente que con los que ya están, no han tenido respuesta a lo que ellos demandan”, señaló, al tiempo que aclaró: “Aspiran a vivir mejor, aspiran a salir del barro que los condena a todos”.
Elogió también la gestión de Regazzoni como subsecretario de Educación porteño porque fue “uno protagonista fundamental de haber arreglado todos los problemas que se heredaron en las escuelas”.
Vidal dijo que “hay mucho por hacer”. En diálogo con los medios, la precandidata a gobernadora de la provincia de Buenos Aires por el PRO, María Eugenia Vidal, también hizo su descargo contra el Municipio, y cuestionó que cuando llegaron al distrito se encontraron con “problemas de inundaciones en casi todos los barrios y falta de asfalto”. “Después de décadas y décadas de gobiernos, el asfalto nunca llega y eso no es un tema estético, porque cuando no hay asfalto no entra la ambulancia o no entran a recolectar la basura o no hay cloacas”, enfatizó Vidal.
Asimismo, contrastó la situación del barrio con la de la Ciudad de Buenos Aires, y subrayó: “Hay mucho para trabajar pero la buena noticia es que se puede. Hoy cuando llueve en la ciudad de Buenos Aires la gente no se angustia pensando que va a perder todo como pasa en este barrio, porque hicimos las obras y la gente dejó de inundarse”.
“Es momento de que Almirante Brown se despierte”. Lo dijo el precandidato a intendente macrista, Carlos Regazzoni, quien valoró la visita de Mauricio Macri y María Eugenia Vidal. “La gente está muy contenta, porque acá no se trata de estar en contra de nadie, sino a favor del cambio”, destacó.
“La gente es en definitiva la que decide y la que va a votar y me parece una actitud extraordinaria la que toman Mauricio y María Eugenia de recorrer los barrios. A la Argentina le espera un gran momento y creo que es momento de que en Almirante Brown, este gigante de 500 mil habitantes, se despierte y dé una sorpresa para el país”, concluyó Regazzoni.
Macri visitó Brown, junto a Vidal y Regazzoni
