“La vida de mi hijo estaba en peligro”, dijo el acusado


El hecho por el que es juzgado Zaya ocurrió el 21 de enero de 2013 en Glew, cuando un grupo de cuatro jóvenes habría atacado a su hijo para robarle el celular y él, en defensa de su hijo, se enfrentó con ellos. Fue en ese momento cuando presuntamente disparó una escopeta tipo “tumbera”. La víctima, Hernán Benitez, tenía 21 años y murió en el acto.

En la audiencia, que se llevó a cabo ayer en la sala del Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 10 del Departamento de Justicia de Lomas de Zamora, se le otorgó la posibilidad al imputado de expresar unas últimas palabras antes de que se conozca el veredicto.

Las últimas palabras. “Admito todo lo que pasó y lo lamento por el muchacho que falleció”, dijo. “Pero la vida de mi hijo estaba en peligro”, añadió.

A su vez, aseguró que no se considera “una mala persona”, ya que “vive en el barrio hace 24 años y siempre ayudaba a los vecinos”. “Trabajo como colectivero y en mi tiempo libre, como mecánico”, comentó.

Sse encargó de desmentir las acusaciones que lo sitúan como la persona que efectuó el disparo que terminó con la vida de Benitez, y aseguró: “Yo no armo ese tipo de objetos”. Y finalmente, manifestó: “No soy un abusador, como se dijo en un momento, soy un padre de familia”.

El juicio llega a su final. La próxima cita será el martes 7 de julio a las 12, cuando el tribunal de su veredicto y haga la lectura de la sentencia.

Durante los alegatos, que se llevaron a cabo la semana pasada, el fiscal Jorge Bettini Sansoni pidió 10 años de prisión para el imputado, mientras que la querella solicitó 18 años. Por su parte, la defensa, a cargo de Oscar Centurión, implementó el argumento de “legítima defensa” y alegó la absolución de Zaya.

El hecho. En la madrugada del 21 de enero del 2013, en Glew, Hernán Benitez y tres amigos se dirigieron a un quiosco ubicado en la intersección entre las calles Intendente Etcheverry y Espoyle a comprar bebidas.

En ese momento, se cruzaron con Elías Zaya, a quien habrían intentado robarle el celular. Según el relato, el joven recibió un golpe en la cabeza y se fue. Su padre, entonces, habría acudido a la casa de uno de los agresores y los enfrentó. Habría llevado consigo una escopeta tipo “tumbera” y disparó. Benitez murió en el acto.