Sonaban apellidos en Banfield pero nada se concretaba, hasta la jornada de ayer donde se selló el arribo a préstamo de Giovanni Simeone, que ya se entrena en el predio de Luis Guillón a las órdenes de Matías Almeyda, técnico que lo llevó a la primera de la institución millonaria.
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Hasta el momento la pretemporada había sido poco fructífera para los dirigidos por Matías Almeyda. Primero la salida de Nicolás Bertolo a Núñez y semanas más tarde la confirmación de la venta de Ricardo Noir a Racing.
En lo futbolístico el panorama era oscuro, la lesión de Lucas Viatri (desgarro), principal opción en ataque y los resultados negativos en la presentación frente a Racing, en el marco de un amistoso preparativo para la reanudación del torneo, no alentaban a un propicio comienzo.
En lo relativo al mercado de pases la dirigencia por el momento se había mostrado cauta, pese a ello, esta mañana llegó la confirmación de la llegada de Giovanni Simeone para reforzar el ataque del Taladro y así aplacar las aguas en materia de refuerzos.
Cómo viene
Simeone alternó buenas y malas en los últimos meses. A principio de temporada se destacó en el sudamericano sub-20 donde fue goleador del torneo con nueve tantos. Los posteriores meses no pudo plasmar ese rendimiento en su club, Marcelo Gallardo, Director técnico riverplatense, no le dio muchos minutos en la primera mitad de la temporada y Gio cosecho participaciones en solo tres cotejos.
Por último Simeone disputó el mundial de su categoría con la selección argentina y los conducidos por Humberto Grondona se vinieron con las manos vacías en primera ronda, sin tantos del flamante refuerzo del conjunto del sur.
Giovanni Simeone, el primer refuerzo del Taladro
