A dos años de su muerte, recordarán a Micaela


“Se hizo justicia”, dijo su entorno. Es que si bien es el segundo aniversario de su muerte, será el primero tras la condena al asesino.

Al igual que el año pasado, para homenajear a Micaela Medrano, sus familiares y allegados se congregarán en la capilla Nuestra Señora de Luján, ubicada en la esquina de Andrés Bello y Rawson de Longchamps, para participar de una ceremonia religiosa que tendrá lugar desde las 18.

El entorno familiar de la víctima asegura que este año el homenaje se vivirá de otra manera, debido a la condena a cadena perpetua que su asesino, Alberto Leite Ruiz, cumple de manera efectiva.

“Después del juicio nuestra familia está más tranquila”, aseguró Ezequiel, hermano de Micaela, quien justificó esa tranquilidad en el hecho de saber que Leite Ruiz “está pagando por lo que hizo” y que gracias a ello “se hizo justicia por Micaela”.

“Estamos muy conformes con el trabajo que hizo la fiscalía”, afirmó Medrano en diálogo con info Región. “Gracias a su trabajo no hubo forma de que hayan dudas de lo que esa persona le hizo a mi hermana con tanta impunidad y tanta crueldad”, consideró, al tiempo que sentenció: “Hoy podemos decir que la Justicia nos brindó tranquilidad y que mi hermana está descansando en paz”.

Si bien los Medrano están al tanto de que la defensa de Leite Ruiz apeló el fallo condenatorio ni bien fue dictado, desestimaron que el recurso sea tenido en cuenta por la Cámara de Apelación de los Tribunales de Lomas de Zamora. “No tenemos que vivir con ese peso, la sentencia fue unánime”, consideró Ezequiel.

Sentimientos encontrados. “A ella la sentimos presente día a día y la recordamos como una excelente mina. Siempre está a nuestro lado”, expresó el hermano de la víctima, quien además consideró que Micaela “era una muy buena amiga”. “Eso quedó demostrado con el paso del tiempo, porque hasta hoy sus amigas siguen visitándonos”, completó.

El caso. Micaela Medrano fue hallada muerta por su madre en la mañana del 30 de agosto de 2013 en la habitación donde la joven - que era alumna de la carrera de Enfermería- se dedicaba a estudiar. Ese cuarto estaba ubicado a unos cinco metros de la casa principal de la familia Medrano, ubicada entre las calles Marsella y Espronceda al 300, en Villa Centenario.

Pese a la corta distancia entre el cuarto y la casa principal, los padres no escucharon gritos de auxilio ni vieron movimientos extraños. Es por eso que desde el primer momento, los investigadores pensaron que la víctima conocía al homicida.

Tras una serie de investigaciones, la Policía detuvo al ex novio de su hermana, quien tenía en su poder el celular de Micaela, quien el 16 de marzo fue condenado por el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) Nº 2 a cadena perpetua por los delitos “homicidio agravado criminis causae, abuso sexual con acceso carnal, y robo simple”.