Incidentes: las huellas de la violencia y el temor latente


Durante la protesta del martes, se anunció que hoy habría una nueva movilización. Si bien el Gobierno municipal anunció que también hoy se realizaría el pago de la segunda tanda, admitió que “se ha hecho difícil el financiamiento de las cooperativas”. Y mientras tanto, las huellas de los incidentes pueden percibirse en la calle y en el edificio.



Ventanas destrozadas, vidrios rotos esparcidos por las oficinas de la Casa de la Justicia, autos incendiados, camionetas reducidas a chapa por el impiadoso fuego y temor. Ese era el panorama ayer, un día después de los incidentes, en Adrogué.

Es que el martes, las oficinas de Empleo de la Casa de la Justicia, ubicadas a metros del Palacio Municipal de Almirante Brown, sufrieron cuantiosos destrozos, que fueron el final de una protesta de cooperativistas que se caracterizó por el nivel de violencia y fue impulsado por el pago de salarios atrasados. “El reclamo se tradujo en una violencia imparable, quemaron los coches y rompieron puertas y ventanas”, explicó el coordinador de la Casa de Justicia, Santos Aguirre, en diálogo con Info Región.



El temor quedó latente. Los trabajadores habían anunciado que hoy volverían a manifestarse, en caso de no haber una resolución de la situación. “En los últimos días se ha hecho difícil el financiamiento de las cooperativas”, admitió el intendente Daniel Bolettieri sobre la situación, en una conferencia de prensa. “Teníamos un atraso no mayor de 15 días en el pago a la cooperativa y eso se iba a regularizar esta semana”, apuntó.

Los trabajadores forman del área de Gestión Urbana municipal encargada de las tareas de limpieza en las calles y podado de árboles. “Eran demasiadas personas, imposible de parar esa situación. Los cooperativistas prendieron fuego una patrulla de la Policía, un auto y una camioneta”, afirmó Aguirre. Estos vehículos se encontraban estacionados a metros del edificio y ayer eran testimonio del nivel de violencia.



El funcionario explicó que los manifestantes “también se llevaron las herramientas y palas” que usan para trabajar. “Quemaron todo y rompieron todo”, lamentaba una y otra vez el hombre, quien pidió que los pagos a cooperativistas no se realicen más en ese edificio. El pedido es impulsado por el temor de los empleados a volver a sufrir desmanes; de hecho, Aguirre comentó que hubo compañeros que “sufrieron crisis de desesperación, ataques de nervios y algunos terminaron en estado de shock”. Aclararon, en ese marco, que las puertas del edificio permanecerán cerradas hasta el lunes.



¿Qué dijo el gobierno local? Tras admitir las dificultades con los pagos, Bolettieri advirtió que hubo “agitadores” e intereses ajenos a los propios cooperativistas. “Se presentaron todos los cooperativistas y no solo el sector que estaba convocado y a partir de allí, la presencia de agitadores -que nada tienen que ver con los trabajadores cooperativizados- hicieron que se desencadenen los actos de violencia”, analizó el Intendente.

Reiteró, entonces, que si bien la Justicia ya tomó cartas en el asunto y es la que se encargará de determinar qué sucedió y quiénes son los responsables, “hay un condimento extra al atraso”. “Tiene que ver con signos de violencia nunca vistos en Almirante Brown”, apuntó.