Robó chicles de un supermercado, irá a juicio


La Cámara del Crimen -con el voto de los magistrados Marcelo Lucini y Mario Filozof- confirmó el procesamiento de Gastón Horacio Mascias Germán quien fue sorprendido intentando llevarse los chicles sin pagar el 15 de junio último del supermercado Coto ubicado en Agüero 616 de la Ciudad de Buenos Aires.

El encargado de seguridad del local declaró que esa tarde "vio que un sujeto caminaba nervioso por el salón de la planta baja y, cuando estaba en la línea de cajas, guardó paquetes de chicles que ahí se exhibían entre su ropa” y al "advertir que se retiraba sin abonarlas lo interceptó a la salida y solicitó la intervención de personal policial”.

El caso. Alimenta la polémica acerca de la "insignificancia" del hecho y sobre si el derecho penal debe perseguir, o no, este tipo de conductas e inclusive la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional tiene fallos antagónicos al respecto.

La Sala Primera de la Cámara, por mayoría, confirmó el sobreseimiento de un joven que frustradamente intentó sustraer un envase de shampoo y acondicionador de cabello de una farmacia porteña.

Al acusado se le imputaba "haber intentado sustraer sin emplear fuerza o violencia" los cosméticos valuados en 70 pesos.

En ese caso, los camaristas Luis María Bunge Campos y Mirta López González, con la disidencia de su colega Juan Cicciaro, convalidaron la resolución por la cual la justicia de primera instancia eximió de responsabilidad al acusado.

En coincidencia, días antes un hombre en situación de calle intentó llevarse alimentos sin pagar de un supermercado también de la Ciudad de Buenos Aires y fue sobreseído por la Sala Quinta que justificó su conducta en que "tenía hambre".

Los camaristas Ricardo Pinto y Mauro Divito coincidieron con el juez Walter Candela quien consideró que “la acción desplegada por Germán González estuvo justificada en "su necesidad alimentaria apremiante para su salud” y en la "insignificancia de los bienes que se pretendieron sustraer sin el ejercicio de fuerza ni de violencia”.

En ese marco el juez Luis Schelgel explicó que "depende del magistrado que le toque en suerte una persona pueda ser enjuiciada y encarcelada por hurtar un litro y medio de leche, o ser sobreseída inmediatamente si el fiscal no adhiere (o sí) al llamado principio de 'insignificancia'”.