El concejal de Cambiemos Luciano Gómez Alvariño consideró que una audiencia pública “es una buena noticia para la ciudadanía, siempre y cuando sean escuchados los aportes, analizados y volcados en el marco del pliego”.
“No se trata de una audiencia vinculante y lamentablemente, como está configurado el pliego, no tenemos demasiada expectativa de que las observaciones que realizamos sean tomadas en cuenta”, advirtió. Y añadió: “El apuro, que tampoco está justificado, nos hace pensar que esto no va a ser tenido en cuenta”.
No obstante, indicó que esperarán “para ver cuál es la versión definitiva del pliego que propone el departamento ejecutivo para definirlo”. “Mientras tanto, nosotros vamos a seguir planteando las serias dudas que tenemos respecto de la posibilidad de que un pliego como el que está presentando para un nuevo llamado licitación realmente satisfaga las necesidades de recolección de residuos, que son una cuestión sanitaria y no como se dijo en la audiencia que es algo de presupuesto”, enfatizó el edil.
“Esperaremos la devolución del poder ciudadano, la versión final del pliego en el Concejo Deliberante para poder debatirlo en profundidad y más técnicamente, y no en tres minutos que fue lo que nos dieron en la audiencia pública”, concluyó.
La audiencia. Se llevó a cabo el 25 de abril en el Salón de los Espejos del Polo Judicial de Esteban Echeverría. El intendente Fernando Gray, acompañado del subsecretario de Desarrollo Sostenible, Lautaro Lorenzo, y el director de Justicia y Acción Ciudadana de la fundación Poder Ciudadano, Germán Emanuele, encabezó el acto.
“El proceso es muy importante, por eso hemos decidido que además del Concejo Deliberante pase por una instancia de audiencia pública como se hizo en 2008”, había resaltado Lorenzo durante la audiencia, mientras que el Indendente destacó: “Vamos a garantizar que se preserven las fuentes de trabajo y mejorar obviamente el servicio porque el distrito crece, avanza y hay que ir mejorando”.
Aunque se preveían más de 80 oradores, finalmente fueron 48, gran mayoría de ellos fueron concejales y funcionarios.
El conflicto con Covelia. Se desató a fines de marzo y se profundizó en abril, cuando la empresa se negó a prorrogar el contrato, que finalmente sucedió por decreto. El Municipio había anunciado que era hasta mitad de año, mientras se realizaba la nueva licitación.
En este marco, trabajadores de Covelia realizaron medidas de fuerza y dejaron de recolectar los residuos en el distrito, paro que fue acompañado por protestas. ¿El reclamo? Que se garantizara la continuidad laborar para los empleados de la empresa prestadora del servicio.
A raíz de este conflicto, el Municipio intervino y la recolección comenzó a ser realizada por trabajadores municipales.
El 7 de abril, el Concejo Deliberante de Esteban Echeverría aprobó la apertura de la licitación pública para que una nueva empresa quede a cargo del servicio de recolección de residuos a partir de agosto.
Gómez Alvariño reclamó que tengan en cuenta los aportes de la audiencia
