“Clandestinizar las fiestas no es la solución”


A dos semanas de la tragedia en Time Warp, de Costa Salguero, la Justicia porteña, por medio del juez en lo contencioso, administrativo y tributario de la ciudad de Buenos Aires, Roberto Gallardo, prohibió "toda actividad comercial de baile con música en vivo o grabada" al considerar que los controles que realiza el Gobierno local a los establecimientos son "arbitrarios e ilegítimos".

Pese a que la medida quedó sin efecto por decisión del juez Lisandro Fastman, a cargo del juzgado N° 14 en lo Contencioso Administrativo y Tributario de la Ciudad, la polémica quedó instalada y la problemática de fondo que se busca abordar no es nueva. Resulta más compleja que una simple prohibición y tampoco atañe sólo a las fiestas electrónicas. Con este argumento, Oscar Castellucci, titular de la Asociación Civil que lleva el nombre de su hijo Martín Castellucci (fallecido en 2006 tras la brutal golpiza que le propinó un patovica en el ex boliche La Casona, de Lanús) sostiene que de prosperar fallos como el del juez Gallardo sólo traería como consecuencia “clandestinizar” estos eventos, por lo que “los efectos serán absolutamente negativos”.

“Independientemente de respetar el criterio de la Justicia, me opongo a todo lo que sean prohibiciones porque creo que no abordan el centro de la problemática. Se evitan perjuicios en términos inmediatos, pero no se proponen modificaciones sustanciales”, advierte y analiza que lo sucedido en Time Warp no sólo tiene como escenario las fiestas electrónicas, sino la misma nocturnidad.

"Espero que con esto, al menos, el gobierno de la Ciudad registre el verdadero motivo: el cuadro de impunidad e inexistencia de control estatal respecto de la actividad nocturna. Más sencillo que esta medida sería exigirle al Estado que cumpla con sus funciones y, sino, que sancione severamente y ejemplarmente a los funcionarios que no lo hagan", señaló.

Y reflexionó sobre “una falta de enfoque” y “cierta hipocresía” para abordar la problemática. “Esto es un problema de la noche, en términos generales. Todos los espacios de diversión nocturna se están transformando en pantallas, como la Time Warp, para la venta de drogas. Me parece que ésta es la discusión que tendríamos que darnos como sociedad”, señaló.

“Si se prohíben en Capital, se realizarán en Provincia”. Tras impulsar la creación del “Registro Nacional de Empresas y Trabajadores de Control de Admisión y Permanencia” (RENCAP), que fomentó tras la muerte de Martín, Oscar no dejó de involucrarse en las problemáticas relacionadas a la nocturnidad.

Desde ese lugar, opina con autoridad y asegura a Info Región que “si esto se prohíbe en Capital Federal, se puede trasladar a la provincia de Buenos Aires”. “Si prohibís algo, se traslada a otro espacio. Si lo prohibís también en la Provincia, lo que se hace es clandestinizarlo porque los hechos se van a seguir produciendo. De hecho en la Provincia hay más posibilidades por la disponibilidad de espacio en quintas, con lo cual mantenes vigente el problema y le agregas el tema de la clandestinidad”, analiza.

Y repara, además de Time Warp, en otros dos casos que dan cuenta de que la problemática es más difícil de abarcar: la muerte de Yésica Emilia Uscamayta Curí, ocurrida en una fiesta clandestina en una quinta de La Plata a principios de año y la masacre de Cromañón, a fines de 2004.

Acá la problemática que tendríamos que discutir, como adultos no hipócritas, es que la gravedad no pasa sólo porque los pibes consumen drogas o hay una fiesta electrónica en la que se produce esto, sino una matriz compleja que se repite: la connivencia entre empresarios, funcionarios y fuerzas de seguridad que permiten esto”, asegura.

“Los otros son mecanismos secundarios. En un caso una chica se ahoga, en el otro consumen drogas y en el otro prenden una bengala. Si nosotros discutimos la bengala, el contenido de la droga o que haya o no piletas en una fiesta, me parece que eso pierde de vista lo que verdaderamente tenemos que discutir como sociedad, que es la matriz”, sostiene.

Reunión en Nación. Luego de que la semana pasada tuviera su primer encuentro con representantes de la Secretaría de Derechos Humanos de la Provincia, que comprende el área que aborda el tema del control de admisión y permanencia en la nocturnidad, Oscar mantendrá el miércoles próximo una reunión en el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación.

“La de Provincia fue una charla, en la que las autoridades manifestaron preocupación. Quedamos en reunirnos nuevamente para evaluar este tipo de cosas. En Nación convocaron desde el Registro de control de admisión y permanencia y me pareció bueno, sólo sugerí que invitaran a otras organizaciones, como los distintos grupos de Cromañón. El debate excede al Estado y a las organizaciones civiles que colaboramos”, resaltó.

Cintia Vespasiani