Ya es Ley el blanqueo y el pago a jubilados


La Cámara de Senadores de la Nación convirtió en ley ayer el proyecto enviado por el Poder Ejecutivo que permitirá la repatriación de capitales en el exterior y el empleo del Fondo de Garantías de Sustentabilidad (FGS) del Anses para comenzar a pagar las deudas previsionales a jubilados y pensionados, que hayan o no iniciado juicios contra el Estado, por la mala liquidación de sus haberes.

La iniciativa fue aprobada, en general, por 55 votos a favor y once en contra. Tas nueve horas de debate en la Cámara alta, el proyecto reunió el apoyo del interbloque Cambiemos más el peronismo disidente y gran parte del bloque del Frente para la Victoria.

En contra, en tanto, votó un sector ultrakirchnerista, mientras que Proyecto Sur se abstuvo.

Al ser discutida en particular, hubo varios artículos cuestionados por la oposición, como los que hablan sobre el blanqueo y sobre la utilización del Fondo de Garantías de Sustentabilidad de ANSES para pagar las deudas, pero que fueron aprobados, aunque con un margen menor a la votación en general.

La ley contempla el pago de las deudas por haberes mal liquidados a jubilados y pensionados, que se financiará en parte gracias a reformas al Fondo de Garantías de Sustentabilidad (FGS) del Anses y en parte a la apertura de un blanqueo de capitales.

Esto será en el marco de la declaración de la emergencia en los casos de litigiosidad previsional que permitirá al Ejecutivo firmar acuerdos con los jubilados.

Podrán participar aquellos que tienen una sentencia firme favorable en juicios contra el Estado por haberes mal calculados, quienes iniciaron juicios pero aún no obtuvieron fallo y quienes no hicieron juicio, pero se les reconocen haberes mal calculados.

Aquellos con sentencia firme que opten por este programa cobrarán el 50% de la deuda en el primer mes y el resto en doce cuotas trimestrales.

El financiamiento del programa se hará, además de con el blanqueo, con el Fondo de Garantía de Sustentabilidad. Se habilita al Estado a vender las acciones de Anses en empresas privadas hasta un siete por ciento de la cartera que debe permanecer en manos del Estado.

Reforma impositiva. Para fomentar el blanqueo, la ley prevé beneficios impositivos para aquellos que hayan cumplido con sus obligaciones tributarias.

De esta manera, no tributarán nada quienes blanqueen hasta los 305.000 pesos. Pagarán un arancel del 5% quienes blanqueen la compra de inmuebles y capitales por hasta 800.000 pesos y del 10% para los montos mayores. Suma que sube al 15% desde el próximo año.

Además, se otorga un beneficio a los trabajadores de la cuarta categoría del impuesto a las Ganancias que no están alcanzados por Bienes Personales para que queden exceptuados del pago de Ganancias en el medio aguinaldo de junio.

Ambas cuestiones partieron de modificaciones introducidas en Diputados por los bloques del Frente Renovador y Justicialistas.

Es que, además de los cambios en Ganancias, ambos bloques opositores se llevaron las de ganar con modificaciones en la redacción original del proyecto en lo que concierne a Bienes Personales.

En el proyecto del Ejecutivo se contemplaba la eliminación escalonada de ese tributo y total a partir de 2019. A cambio, hay una actualización de las alícuotas, pero no su eliminación.

Pensión a la vejez. Además de la actualización de los haberes, se impulsa la creación de la pensión a la vejez, que será a partir de los 60 años para las mujeres y de los 65 para los hombres y supone el ochenta por ciento del haber mínimo jubilatorio.

Entre otros puntos, el proyecto establece que el programa de reparación para jubilados y pensionados sea optativo, apuntando a un tercio de los jubilados (casi dos millones y medio).

Respaldo de los gobernadores. La propuesta obtuvo rápido el apoyo de los gobernadores tras la firma del acuerdo para devolverles el 15% de la coparticipación que desde 1992 se retenía para financiar el sistema previsional.

El presidente de la Comisión de Trabajo y Seguridad Social, el peronista pampeano Daniel Lovera, defendió la iniciativa argumentando que se trata de “una reparación para jubilados” que “busca un blanqueo de capitales para hacer frente a esa tarea”.

No obstante, destacó la “restitución” del quince por ciento de la Coparticipación para las provincias a las que se les había retenido desde la década de los ’90.

El presidente del bloque radical, Angel Rozas, consideró a la iniciativa como “trascendente”, ya que “no solo ha puesto a prueba el carácter social y federal del gobierno nacional, sino que viene a saldar con sensatez y equidad las deudas internas más serias que tienen los argentinos”.

En tanto, el presidente del bloque del Frente para la Victoria, Miguel Angel Pichetto, evaluó que “el corazón del eje de este debate tiene como finalidad el pago a los jubilados y un compromiso y un desafío para el gobierno”.

La peronista disidente Liliana Negre de Alonso, en tanto, destacó que “hay una deuda pendiente” y “una violación a los derechos humanos” en referencia a lo que se les debe a los jubilados, al tiempo que adelantó que votará el blanqueo de capitales “porque tiene una asignación específica para que estos fondos vayan a abonar esta reparación”.

Finalmente, la ultrakirchnerista María Labado fustigó duramente al proyecto y denunció que “el blanqueo no garantiza el financiamiento” del pago de las deudas.