“Somos una empresa de construcción política, no de reciclado”


“No vamos a permitir amontonarnos con dirigentes que tienen causas en la Justicia. Lo único que nos interesa es lograr leyes para la gente", se le oyó decir en Tigre al diputado nacional del Frente Renovador Alejandro Grandinetti, no para marcar la cancha pero sí para aclarar que el massismo “tiene límites claros” en la búsqueda de consensos.

Es que, además de la clara sintonía con la líder del GEN, Margarita Stolbizer, Sergio Massa logró esta semana una foto que preocupa al Gobierno macrista: la conjunción del peronismo no kirchnerista. En un encuentro en una fábrica de Tigre logró aglutinar en torno a la reciente aprobación de las leyes de fomento a PyMEs y autopartistas a dos caras con peso en el Senado: los jefes de bancada del FpV, Miguel Ángel Pichetto, y de Justicialistas, Oscar Romero.

“Hay una confluencia con algunos senadores como Pichetto y gran parte del FpV, como Abal Medina, con la ley PyME por ejemplo, o al pedir que se readecuen los subsidios en el tema gas y energía eléctrica. La verdad es que lo que Sergio Massa está construyendo, y comparto totalmente como idea final, es una reunión de diferentes dirigentes sobre políticas de Estado. La idea de una agenda común es muy superadora a la práctica política ordinaria, donde primero era diferenciarme para después considerar como enemigo al que está del otro lado”, celebró.

No obstante, consultado sobre su resquemor y el “amontonamiento” al que se refirió en el mismo acto, Grandinetti aclaró: “Lo que quise decir es que somos una empresa de construcción política y no de reciclado”. “El límite son los hechos delictivos, eso no quiere decir que nos impongamos una visión de fiscales de la Nación, porque para eso está la Justicia, pero nos queda claro cuál es el límite”, advirtió, en clara referencia a la situación que atraviesa el kirchnerismo, con algunos ex funcionarios –con el paradigmático caso de José López a la cabeza- investigados por la Justicia.

Hay un límite, por más que acordemos políticas de Estado, y los protagonistas que quieran acercarse a este espacio deben tener ese aspecto absolutamente en claro”, señaló, ante el posible costo político que podría tener, para el líder del FR, un acercamiento con el PJ.

Proyecto de traspaso de policía local. Al margen de los reparos y las advertencias, el diputado destacó el proyecto presentado por intendentes y legisladores del FpV y el Frente Renovador para pedir el traspaso de la Policía local a la órbita de los municipios.

“Que el intendente sea ajeno a la discusión de la política de seguridad no es bueno. La forma de relacionar esa policía local con la provincial es materia de estudio y de especialistas, pero no me cabe la menor duda de que el poder político tiene que estar cerca del principal reclamo de los vecinos en general, que es la seguridad”, destacó.

Y atribuyó la iniciativa a “la madurez política” de los diferentes espacios. “Lo ha demostrado Sergio, que es un gran constructor. Pasó con Margarita Stolbizer, cuando armamos una agenda principalmente con una ley como la de acceso a la información pública, en la que trabajamos en forma conjunta y teníamos una visión muy parecida, pasó con la extinción de dominio, que creíamos que era una buena herramienta para apoderarse de los bienes mal habidos de las organizaciones criminales y de los corruptos que les roban al pueblo, y también se ve con esto”, destacó.

“Por eso creo que, lejos de hablar en términos electorales, lo que se comenzó es un trabajo concreto de hoy, aún a un año de lo electoral, donde tenemos una magnífica oportunidad de poder tener confluencias en políticas de Estado. Lo veo muy posible”, indicó, en referencia a los consensos del massismo con el GEN y con parte del FpV en el Senado.

La posibilidad de que funcionen como interbloques en el Congreso aún no es palpable, pero Grandinetti admite que eso puede plasmarse en “una oposición constructiva, como lleva adelante el Frente Renovador”. “Creo que es el signo de este 2016, donde hay una exigencia muy marcada de la gente ante hechos de corrupción y ante una economía que no reacciona y decrece. Eso requiere de mucha responsabilidad de los dirigentes y, en ese sentido, es el paso que está dando Sergio Massa y algunos dirigentes como Margarita Stolbizer o Pichetto”, aclaró.

Flores a Margarita. Por fuera del chiste, Grandinetti admite que la figura de la líder del GEN aporta “transparencia” e “integridad”. “Tengo con Margarita una relación en Diputados de mucho afecto, respeto y cariño, con un gran reconocimiento de su labor. Creo que lo que ha hecho desde la ética, la moral y el compromiso político es una construcción que ha trascendido incluso la provincia de Buenos Aires con su candidatura a presidente”, señaló.

En ese sentido, consideró su cercanía al líder del FR como “un aporte muy importante”. “Va en línea con esto que decía, que es entender a la política con una ética o una moral que no puede estar exenta de buscar soluciones concretas. Se puede estar de acuerdo o no con ella, pero nadie puede juzgar la vocación y la integridad de Margarita y el bien que le hace a la política argentina. Siento que es un orgullo coincidir con ella en algunos temas”, agregó.

Cintia Vespasiani