Crónica de una obra anunciada, pero aún no terminada


En el marco de un proyecto integral que busca mejorar la circulación vehicular en uno de los accesos principales al distrito, el Municipio de Lomas de Zamora, junto al Gobierno Nacional, informó en las últimas horas que siguen adelante con las obras del nuevo Viaducto de Puente La Noria sobre la Autopista Presidente Perón.

Hoy, la obra en Puente La Noria se encuentra en la zona de la rotonda. La construcción del viaducto que une Provincia con Capital Federal que beneficiará el acceso a más de 80 mil vehículos por día tuvo un avance de 400 metros desde diciembre.

“Los equipos de obra siguen llevando la construcción e instalación de las vigas de soporte y el hormigonado de la base de la losa, que a futuro será la calzada de los puentes de circulación. En este sentido, los trabajos ya avanzaron más de 420 metros, en los 14 tramos de obra, con la construcción de la base en hormigón de la futura calzada. Este progreso da un total de más de 140 vigas instaladas, entre cada dintel”, explicaron desde la Comuna a este medio.

Precisaron, además, que “se está trabajando sobre las colectoras con la construcción de los nuevos pavimentos en hormigón y en paralelo se sigue avanzando con acciones de pilotaje y construcción de columnas y dinteles en el sector de la rotonda”. Por lo antes mencionado, indicaron que “en breve se prevén cortes y desvíos para permitir la continuidad de las distintas obras contempladas en el proyecto”.

El tan esperado aliviador fue presentado oficialmente en 2012 y su fecha de finalización cambió en dos oportunidades. En el medio, la ansiedad y el malestar por parte de los vecinos de la zona, las empresas de colectivos que cambiaron sus paradas y dos gobiernos nacionales y dos provinciales con proyectos políticos distintos son algunos de los datos detrás de una obra catalogada como “la más importante de las últimas décadas”.

Cronograma de una obra que se extendió más de lo deseado. El proyecto general del aliviador se presentó en 2011 y la licitación se hizo ese mismo año. Sin embargo recién en febrero de 2012 se anunció formalmente la obra y sus beneficios para los casi 80 mil vehículos que circulan por día en la zona.

El propio intendente lomense, Marín Insaurralde, manifestó en ese entonces: “El nuevo viaducto es una de las obras más importantes que se encararon en las últimas décadas, ya que beneficiará a miles de vecinos y garantizará una mejor circulación vehicular desde Lomas de Zamora hacia Capital y viceversa. Era una deuda pendiente para darle fluidez al tránsito y terminar con las filas interminables de autos, camiones y colectivos”.

La puesta en marcha y la construcción de la misma comenzó en septiembre de 2013, casi un año y medio después de su anuncio formal. En ese momento la fecha de finalización estaba estimada para abril de 2015.

Las obras demoraron más de lo esperado y recién en diciembre de 2015 se formalizó el comienzo de la segunda etapa de la obra. También se modificó la fecha de finalización, ya que en un acto del que participó el presidente Mauricio Macri, la gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal y el intendente Insaurralde se informó oficialmente que “estaría lista en junio de 2017”.



¿De qué trata la obra? El plan contempla la construcción de un viaducto que conectará la Autopista Presidente Perón con General Paz, lo cual evitará que los más de 80 mil vehículos que circulan por la zona tengan que pasar por la rotonda para llegar a Capital Federal, acelerando 40 minutos el recorrido entre Provincia y Capital. En tanto, el Camino de la Ribera quedará unido sin interrupciones y se convertirá en otra vía alternativa para ir al centro de la Capital en paralelo al Riachuelo.

El nuevo viaducto tendrá dos carriles por mano, así como también distintas subidas y bajadas. Estas conexiones permitirán el fácil acceso para el tránsito que proviene del centro de Lomas de Zamora y de los distintos barrios, así como también de aquellos vehículos que llegan desde otros distritos de la región.

Quejas vecinales y caos vehicular. Las obras tienen como fin descongestionar el tránsito por medio de un aliviador que evitará que los miles vehículos que circulan diariamente por la zona deban converger en la rotonda que distribuye el tráfico hacia Lomas de Zamora y Capital Federal.

Sin embargo, el proceso de construcción genera el efecto contrario: complican no sólo a conductores sino también a usuarios de transporte público, que deben soportar interminables embotellamientos en horas pico, la reproducción de bocinazos en cadena y maniobras viales riesgosas.

A esta situación se suman los inconvenientes que provoca el tránsito de colectivos, que debieron trasladarse a una nueva instalación que cuenta con dársenas y un incipiente centro comercial. El proceso de adaptación y de cambios fue progresivo. La nueva terminal, por la cual circulan más de 500 mil usuarios de transporte público por día, se encuentra en un predio ubicado detrás de donde se hallaba la antigua playa de colectivos, con infraestructura moderna y mayores comodidades. En total son cerca de 20 las líneas que confluyen en la zona.

Más allá de los aspectos positivos de la obra y sus ejes negativos producto de las demoras, se espera que pueda estar terminada para junio de 2017.



HPF de la redacción de Info Región.