Las detenciones se concretaron en Villa Lugano, donde efectivos de la comisaría 48 cortaron el tránsito de la avenida General Paz y el cruce con la Riccheri y realizaron un retén para impedir el paso del Audi A5 en el que llevaban secuestrada a la víctima, de 47 años.
El hecho. Todo comenzó el martes en la calle San Martín, entre Laprida y Boedo, en pleno centro de Lomas de Zamora, cuando el odontólogo fue secuestrado por cuatro delincuentes que se movilizaban en un Peugeot 308.
Según las fuentes, el hombre se hallaba en su auto cuando fue sorprendido por los secuestradores que lo amenazaron con armas. Dos de los delincuentes se subieron al vehículo y se lo llevaron cautivo, mientras que los otros dos los seguían a pocos metros en el Peugeot como "campana".
Inmediatamente, los captores comenzaron las llamadas extorsivas a la familia, exigiendo alrededor de 50 mil dólares como rescate, por lo que los familiares alertaron a la policía de la provincia de Buenos Aires lo que estaba ocurriendo.
En ese momento, efectivos de la Dirección de Investigaciones (DDI) de Lomas de Zamora comenzaron a intervenir, bajo las órdenes del juez federal de ese distrito, Alberto Santa Marina, quien impartió distintas directivas en el marco del protocolo habitual para este tipo de casos.
Como la camioneta Audi estaba siendo monitoreada por una empresa de rastreo satelital, los investigadores supieron que se estaban desplazando por la avenida General Paz con sentido hacia el Río de la Plata y que en cierto momento, retomaron como para regresar a provincia.
Por este motivo, se le dio intervención también a la Policía Federal y efectivos de la comisaría 48 decidieron cortar el tránsito en el cruce de esa avenida con la autopista Riccheri y montar un retén para impedir el paso del vehículo.
Tiroteo. Al ver lo que ocurría, los delincuentes comenzaron a disparar contra los policías, que repelieron la agresión disparando contra los neumáticos, tanto del Peugeot como de la camioneta Audi.
Los delincuentes intentaron embestir a los policías que estaban en el retén y continuaron la fuga casi un kilómetro más, hasta que fueron detenidos cuando escapaban corriendo.
En poder de los detenidos fueron secuestradas tres pistolas calibre 9 milímetros, dos de las cuales pertenecían a personal de la Policía Federal, en tanto que el odontólogo secuestrado fue rescatado, cuando aún se hallaba sentado en el asiento trasero de su auto, en medio de una crisis nerviosa.
Los detenidos son todos mayores de edad y viven todos en la zona sur del conurbano, quienes quedaron a disposición del juez federal Santa Marina.
Un nuevo secuestro extorsivo en Lomas enciende el alerta
