Vidal desplazó la cúpula del Servicio Penitenciario Bonaerense


La gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal, le pidió la renuncia al jefe del Servicio Penitenciario Bonaerense, Fernando Díaz, y a toda la cúpula de ese organismo. Las intenciones del Ejecutivo serían colocar en su lugar a civiles, en sintonía con la decisión que tomó hace dos semanas el ministro de Seguridad Cristian Ritondo, que puso el manejo de los fondos policiales en manos de un civil.

El reemplazante de Díaz será Juan Baric, actual subsecretario de política penitenciaria.

El anuncio lo realizarán mañana a las 10 Vidal y el ministro de Justicia provincial Gustavo Ferrarri, quienes darán una conferencia de prensa en la Casa de Gobierno, en La Plata, para brindar precisiones sobre el tema.

A poco de asumir Vidal en la Gobernación, el Servicio Penitenciario Bonaerense quedó en el centro de la polémica cuando los hermanos Cristian y Martín Lanatta y Víctor Schillaci, condenados a prisión perpetua por el triple crimen de General Rodríguez, escaparon de la Unidad Penal N° 30 de General Alvear, presuntamente con complicidad de las autoridades que debía velar por su encarcelamiento.

A principios de mes, la Comisión Provincial por la Memoria había pedido el desplazamiento de Díaz, quien enfrenta una causa por administración fraudulenta en perjuicio de la administración pública en concurso real con el delito de vejaciones por irregularidades en el servicio de catering del complejo penitenciario federal de Salta.