Presentaron un manual para evitar riesgos escénicos


“Y nadie sabía qué hacer.” Con esas cinco palabras que denotan angustia e impotencia culmina la nota con la que arranca el libro y que fue escrita por uno de los músicos que vivió, en primera persona, el fallecimiento de su compañero de banda por electrocución arriba de un escenario. Y es justamente para saber qué hacer, y no solamente cómo reaccionar sino también cómo evitar y prevenir, que el Instituto Nacional de la Música (INAMU) se propuso comenzar a trabajar en el proyecto.

Se trata de “Escenarios Seguros”, la campaña bajo la cual lanzan el “Manual de Formación sobre Prevención de Riesgos Escénicos” que tiene el objetivo de “transmitir y crear conciencia de modo claro sobre qué se debe hacer ante incidentes como una descarga eléctrica o electrocución", indica a Info Región el presidente del INAMU, Diego Boris. Por supuesto, también apunta a la prevención.

“La idea del Manual surge luego de que en los últimos dos años fallecieran cinco músicos por electrocución arriba del escenario y tres asistentes. Nos pareció que había que hacer algo porque en la actividad musical se convive a veces con situaciones de riesgo y no se tiene siquiera dimensión de que eso sucede”, señaló.

El texto fue elaborado en colaboración con el Sindicato Argentino de Técnicos Escénicos (SATE), el Sistema de Atención Médica de Emergencias (SAME), la Asociación Electrotécnica Argentina (AEA), Bomberos de la Policía Federal y familiares de la tragedia de Cromañón.

Entre estos últimos, Nilda Gómez, titular de la Asociación Familias por la Vida y madre de Mariano Benítez, fallecido en la tragedia de Once. “Los escenarios no están bien armados y deben prevenirse este tipo de incidentes, por eso colaboramos”, apuntó a este medio y celebró que, para ellos, “es una forma de reconciliación con la música”.



El manual. Desarrolla información clave sobre seguridad eléctrica, primeros auxilios, prevención de incendios y las condiciones de protección necesarias para prevenir accidentes en recitales y conciertos.

Es un manual básico de prevención de riesgos escénicos, en el que justamente se describe de manera muy clara ciertas situaciones de peligro y cómo prevenirlas. También se contó con el aporte de Alberto Crescenti, del SAME, que refiere a todo lo que hay que hacer cuando sucede algún problema de estos”, señala Boris.

De esta manera, el escrito también desarrolla cuestiones técnicas como qué es un disyuntor, una térmica, un amperaje, etc. “La realidad nos mostró que hay una situación precaria en cuanto a las condiciones de electricidad. Hay un grado de desconocimiento muy grande por parte de los músicos y algunas veces también por el lado de los técnicos. Esto que puede suceder en un escenario también puede pasar en una sala de ensayo o en un estudio de grabación”, resalta y advierte: “Buscamos crear conciencia de que con pocas cosas que se cambien se puede evitar una tragedia, entendiendo que la seguridad plena no existe, pero mejorando el punto de equilibrio en el cual se desarrolla la actividad”.

Cintia Vespasiani