Este año habrá un juicio por jurado en Lomas de Zamora


Durante 2017 se realizará solo un juicio por jurados en Lomas de Zamora, según precisó la Suprema Corte de Justicia.

Se llevará adelante en el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 10 del Departamento Judicial de Lomas de Zamora, el 28 de marzo.

Balance de 2016. Durante el año pasado se llevaron adelante tres juicios por jurado en la Región en el que hubo dos fallos absolutorios y uno condenatorio.

Este tipo de procedimiento comenzó a realizarce en la provincia de Buenos Aires en marzo de 2014. Para cada juicio se seleccionan 48 personas, como producto de una audiencia para determinar los posibles integrantes del jurado, mediante preguntas que hacen cada una de las partes.

Luego se reúnen en forma privada el juez, el fiscal y el abogado defensor y allí se plantean hasta cuatro recusaciones sin causa, por parte. Entre quienes quedan, se hace un sorteo, y salen designados los 18 integrantes del jurado.

Está compuesto por 12 personas, 6 mujeres y 6 hombres, y 6 suplentes. Los requisitos para ser uno de los integrantes son: ser argentino nativo o naturalizado con una residencia de por lo menos 5 años, comprender el idioma, no tener impedimentos psíquicos o físicos y no estar limitado legalmente. No podrán participar abogados, políticos electos, integrantes de fuerzas de seguridad, defensa, servicio penitenciario o seguridad privada, ni del Poder Judicial.

Absolución de Godoy. El primero se realizó en agosto, cuando el jurado decidió absolver a Juan Carlos Godoy por el crimen de Jonathan Alexis Zabala, un joven de 17 años que fue embestido por un auto cuando se movilizaba en motocicleta con su novia, y recibió un disparo en el cuello en 2014 en Remedios de Escalada.

La decisión fue tomada por unanimidad en el juicio por jurados que se realizó en el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 4 del Departamento Judicial de Lomas de Zamora. Durante los alegatos, la fiscal había optado por declararlo culpable ya que consideró que el móvil del asesinato fue por “venganza”, sin embargo el abogado defensor expuso que el imputado había sido acusado injustamente y que le había armado la causa la policía.

Absolución a Di Giovanni. El segundo de los juicios se llevó adelante en septiembre de 2016. Allí Gustavo Di Giovanni, un custodio privado de 48 años, también fue absuelto en la causa que lo tenía como imputado por matar de dos balazos a un joven, Miguel Rajoy, que cuidaba coches en la feria de La Salada, en agosto de 2014

En el proceso, Di Giovanni relató que el domingo 17 de agosto de ese año fue a comprar a la feria acompañado de su esposa e hijos y que Rajoy lo “intimidó con un arma para robarle”. Ante esa situación, aseguró que “tuvo que defenderse”.

Manifestó, además, que el joven de 19 años “estaba drogado y le había intentado disparar al nene” lo que motivó su reacción.

Uno de los puntos confusos del hecho es que el arma que habría tenido Rajoy nunca apareció en el lugar. Sin embargo, luego de escuchar varios testimonios incluidos el de los dos menores en Cámara Gesell, el jurado resolvió absolver a Di Giovanni porque consideró que actuó en legítima defensa.

Condenaron a Chávez. El último juicio se llevó adelante en diciembre y en él fue condenado Raúl Chávez por "homicidio agravado por uso de arma de fuego" en perjuicio de su vecino Gonzalo Miño, en enero de 2015.

Según se pudo reconstruir a partir de las declaraciones realizadas en la audiencia, todo comenzó cuando la víctima llegó de trabajar y salió a la vereda a tomar una cerveza y fumar un cigarrillo de marihuana. En este punto los testigos señalaron que esta situación fue el eje del enojo de los vecinos de enfrente, la familia Chávez.

Miño discutió con Raúl y los padres de este por cuestiones que no quedaron muy claras hasta que la mujer de nombre Liliana, madre del imputado, ingresó a la casa y salió con un arma que le entregó al agresor, al grito de: “Dale, tirale”.

Luego de eso, Chávez realizó tres disparos, dos de los cuales impactaron en la pierna de Gonzalo Miño, que fue trasladado al hospital y murió seis días después por la gravedad de la herida.

La fiscalía y la querella se encolumnaron en la idea de homicidio mientras que la defensa optó por intentar demostrar que el imputado no quiso matar a la víctima sino amedrentarla.

HPF de la Redacción de Info Región.