“Pueblo que no está en la calle, no tiene destino”, enfatizó Micheli en el comienzo de su discurso en el acto de cierra de la jornada de protesta y recalcó que “ojalá que hasta que caiga este modelo económico, haya todos los días una marcha”.
Remarcó, en este punto, que las centrales obreras “siempre” van a estar en la calle y negó que sean desestabilizadores como sostienen desde el Gobierno. “Están ahí por el voto del pueblo. Respetamos su mandato. No tenemos intención de desestabilizar de nadie”, aseguró.
Advirtió luego que “acusar de desestabilizadores a los docentes es una vergüenza por parte del Gobierno”. “Piensan con cabeza de patrones, de derecha, neoliberal. Piensan que los trabajadores tenemos que estar arrodillados ante sus políticas”, criticó y añadió que en el oficialismo “tienen una política antisindical rabiosa”.
Muerte en Santa Fe. Micheli también reclamó que se “esclarezca” lo ocurrido ayer en la localidad de San Lorenzo, a 20 kilómetros de Rosario, donde un camionero que quiso evitar la protesta de gremios de la CTA y la CGT atropelló y mató a uno de los manifestantes, afiliado al Sindicato de Vigiladores.
Denunció, en este marco, que el Gobierno “incita a la violencia” con su discurso antisindical. “Los muertos los ponemos los trabajadores. Nuestro homenaje al compañero muerto. Que se esclarezca esta situación”, insistió.
Reclamos. Por último, el titular de la CTA Autónoma precisó los principales reclamos de la marcha. Pidió “parar los despidos”, “paritarias sin techo”, “aumento de emergencia para los jubilados, que sea nueve mil y pico la jubilación mínima como dijo Macri”; y “frenar las importaciones ya que las pymes están arruinadas”. “Hay que parar el ajuste”, sentenció.
“Marzo pasó a la historia”. Por su parte, el dirigente gremial docente y titular de la CTA de los Trabajadores, Hugo Yasky, afirmó que el mes de marzo "pasó a la historia porque fue la expresión de que el pueblo argentino está de pie".
"A veces nos preguntan si nos une el espanto. Respondemos que nos unen las mismas convicciones con la CTA de Micheli, con la CGT del Barba, que es la unidad del movimiento obrero", agregó y recordó que siempre existieron divisiones en las centrales sindicales como "la CGT de Ubaldini, que marchó contra la dictadura el 30 de marzo, y la CGT de Jorge Triaca (padre)".
"Vamos a hacer la unidad con todos los que se comprometen con la clase trabajadora" y en referencia al actual gobierno, destacó: "Queremos que siga su mandato hasta el último día, pero no vamos a firmarle ningún cheque en blanco. Basta de ajuste y de hambre".
También afirmó que "ningún empresario manchó con su sangre", las calles durante las dictaduras o en medio de crisis económicas porque "siempre fueron los trabajadores", los que perdieron la vida.
Quien también habló en el acto de cierre fue el secretario de interior de la CGT, Francisco “Barba” Gutiérrez. Afirmó que el paro general del 6 de abril será “el inicio de un plan de lucha hasta la victoria del pueblo argentino”.
Movilización. Previo al acto que arrancó a las 17, se realizó una movilización de la que participaron miles de personas.
La marcha, convocada por la CTA de los Trabajadores y la CTA Autónoma, provocó un colapso prácticamente total en la zona del Centro porteño.
Una de las columnas más numerosa fue la de ATE, que con sus carteles y banderas verdes marcaron procedencias de distintas regionales de la provincia de Buenos Aires y del interior del país. También se sumaron los docentes de Suteba, e integrantes del partido Nuevo Encuentro, entre otras organizaciones.
Además asistieron los profesores nucleados en la Conadu, las Madres de Plaza de Mayo-Línea Fundadora y la Asociación Madres de Plaza de Mayo que lidera Hebe de Bonafini.
Poco antes de que se iniciara la ronda de oradores, se leyó una carta de adhesión enviada por Milagro Sala enviada desde la cárcel de Alto Comedero, en Jujuy.
Las CTA marcharon a Plaza de Mayo y pidieron "parar el ajuste"
