“La policía entró a reprimir al comedor”, denuncian desde el MTE


Las dos versiones de lo ocurrido en el comedor “Cartoneritos”, de Villa Caraza, en Lanús, son diametralmente opuestas. Desde la Comuna difundieron un comunicado en el que atribuyen el ingreso de la Policía Bonaerense y la Local al espacio, al que acuden los hijos de los trabajadores que salen a cartonear, a la persecución de un fugitivo con pedido de captura. Sostienen que en ese momento no había pequeños y que la intrusión no fue violenta. Desde el comedor, en tanto, niegan totalmente esa versión y aseguran que el drama se inició cuando fueron a solicitarle a los efectivos policiales que alejaran el operativo dispuesto en la entrada de la guardería de Cartoneritos por temor a que, en algún enfrentamiento, saliera un chico herido.

“Dicen que entraron buscando a alguien, pero no estaban persiguiendo a nadie. Se acercó una compañera del comedor (Judith, que cocina y asiste a los chicos) a pedirles si podían alejar el operativo de la puerta de la guardería porque, ante cualquier problema que surgiera en el operativo, como un tiroteo, iba a terminar lastimado algún pibe adentro del comedor”, relata a este medio Nicolás Caro Prefi, uno de los referentes del Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE), que brinda contención en el espacio.

“Pero el resultado no fue ese (que algún chico saliera herido por incidentes en el operativo), sino que fue peor. La policía entrando a reprimir al comedor. Se llevaron detenidos a dos pibes del comedor, un menor de 16 años y un adulto de 22 o 23, porque trataron de defender a los niños y a la señora”, señala a Info Región.

Y detalla: “Los tuvieron secuestrados durante dos o tres horas adentro de un patrullero, primero en un descampado a la vera del Riachuelo, en la ribera de Lanús, y después atrás de las vías del tren en Caraza. Al mayor lo golpearon en ambas ocasiones”.

Nicolás se enteró de lo sucedido casi en tiempo real, cuando Judith le envió un audio con tono desesperado vía WhatsApp en el que le alertaba de lo sucedido: “Nico estábamos con los chicos comiendo en casa y estaban haciendo un operativo. Pararon un auto en la puerta de casa, filmando todo. Les fui a pedir si se podían correr y me empujaron. Y ahí fue cuando le dijo por qué le falta el respeto y ahí empezaron a agredir a empezar a correr con los palos. Patearon. Rompieron todo. Entraron, tiraron gas pimienta, hay chicos lastimados. Tiraban con sillas, con tiros, están todos los casquillos. No sabemos qué hacer ya Nico. Estoy nerviosa, la gente está en la comisaría. Tengo chicos lastimados, eso es lo peor de todo. Se llevaron a detenidos que nada que ver”.

El tono de la mujer suena desesperado. Se quiebra. Y desmiente que no hubiera chicos al momento de lo sucedido.

“Había chicos, mienten. Había casquillos de 9 milímetros, hubo disparos de bala de goma porque tenemos heridos también. Adentro y en la puerta del comedor”, asegura Caro Prefi y señala que “al que acusan de delincuente ni siquiera le habían llegado a pedir los datos”.

“No lo estaban persiguiendo. Nosotros lo conocemos. Pasaba por acá a buscar a otro compañero para ir a trabajar porque forma parte de la cooperativa que va a trabajar todos los días al hospital, a hacer tinglado”, aclara y reitera: “Ni siquiera lo persiguieron. Se metieron al comedor directamente. Y aunque esté Bin Laden adentro del comedor, no pueden entrar de la manera que entraron, habiendo chicos”.

Según el relato del referente social, el hombre al que desde la Comuna alegaron perseguir “luego se presentó en la comisaría quinta de Villa Diamante para hacer un descargo de lo sucedido”. “Presentó toda su documentación y no había ningún pedido de captura. Incluso tenía una condena ya cumplida, estaba en libertad”, señala.

Y ratifica lo señalado por Judith en el audio: “Se metieron adentro del comedor, tiraron gas pimienta y llenaron la comida de gas pimienta, por lo que los chicos no pudieron comer”.

Si bien Info Región intentó en reiteradas oportunidades comunicarse con los secretarios de seguridad, Diego Kravetz, y Gobierno, Adrián Urreli, todos los intentos resultaron fallidos.

Marcharán para denunciar persecución. El martes desde las 14 los vecinos del barrio y la comunidad de Caraza afectada por el hecho se movilizarán al Municipio. “Llegaremos entre las 15 y 16 para pedir Justicia y que se revea la posición del secretario de seguridad municipal, que se dice que estuvo presente en el operativo que terminó en esta represión”, apuntó Caro Prefi.

Además, denunció que en el comedor ya habían tenido “conflictos” con la Policía local. “Ya venían cacheando a los pibes de 13 y 14 años antes de entrar al comedor. Los tiraban contra la pared y les revisaban pantalones y zapatillas”, señaló.

CSV de la Redacción de Info Región.