Duro mensaje de Poli en el Tedeum patrio


Tras un breve desayuno de chocolate caliente y churros con los ministros y funcionarios de su Gabinete en el Salón de los Bustos de la Casa Rosada, el presidente de la Nación, Mauricio Macri, recorrió en una caminata con funcionarios los 250 metros que separan la Casa de Gobierno de la Catedral Metropolitana para participar del tradicional Tedeum en el Día de la Patria.

La celebración por el 207 aniversario de la Revolución de Mayo se realizó en la Catedral Metropolitana y fue oficiada por el arzobispo porteño, Mario Poli. Allí llegó Macri minutos antes de las diez de la mañana, hora en que comenzó la ceremonia, acompañado de la primera dama, Juliana Awada.

Previo a tomar parte de la celebración, el Jefe de Estado aseguró que se encuentra en buen estado de salud, tras la descompensación que sufrió el miércoles en Ecuador. "Estoy bien de salud, fue una descompensación por la altura. Me bajó la presión y tuve que hacer reposo. Fue un momento feo, pero nada grave", dijo el Presidente y prometió "un mensaje de entusiasmo" en el marco del Tedeum.

No obstante, en su mensaje frente al Presidente, Poli pronunció palabras con duro contenido al referirse a la realidad social del país. "La inequidad genera violencia", sentenció.

Además, expresó: "Comprobamos que muchos pueden pensar que no hay motivo para hacer fiestas patrias cuando buena parte de nuestro pueblo no se siente invitado". Ante el mandatario y la primera dama, añadió que "no existe realidad social que no pueda ser redimida".

Si bien valoró las estadísticas oficiales al referirse a la pobreza en el país, subrayó que "los porcentajes invisibilizan el dolor de las familias" y afirmó que "nadie puede sentirse excluido de hacer algo por el prójimo".

"La solución a nuestros desafíos internos, algunos estadistas lo llaman deuda social interna, depende prioritariamente de nosotros", expresó el cardenal primado de la Argentina.

Además, advirtió que "es conveniente volver a confiar y apostar a las reservas culturales, morales y espirituales de nuestro pueblo". "Así como también a su capacidad de trabajo e ingenio científico que, unido a la perseverancia en las pruebas, le ha permitido sobreponerse a tantas promesas incumplidas, fracasos y postergaciones. Dejémonos interpelar por la realidad humana que vivimos", remarcó.

Caminata a la Catedral. El Presidente y la Primera Dama estuvieron acompañados durante la caminata por el titular provisional del Senado, Federico Pinedo, el presidente de la Cámara de Diputados, Emilio Monzó, el titular de la Corte Suprema, Ricardo Lorenzetti, y por los ministros del gabinete nacional.

Cuando se aproximaba a la Catedral se sumó a la comitiva la vicepresidenta Gabriela Michetti. También asistió a la ceremonia el jefe de Gobierno de la ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta.



A su paso el Presidente recibió honores de sendas formaciones de la Fanfarria Alto Perú y del Regimiento Granaderos a Caballo General San Martín apostadas en el lugar.

Además de los integrantes del Poder Ejecutivo, también asistieron líderes de diferentes confesiones y representantes de distintas instituciones religiosas que fueron invitados por la Iglesia.

Una vez concluida la ceremonia, Macri y los ministros del Gabinete volverán a la Casa Rosada para encabezar un almuerzo con organizaciones barriales y sociales convocadas por la ministra de Desarrollo Social, Carolina Stanley.

El tradicional locro patrio y los pastelitos de dulce de membrillo se servirán en el Museo Casa Rosada, ya que ante la lluvia se decidió hacerlo en ese lugar y no en la Residencia Presidencial de Olivos.