Luchemos por la Vida pide que la seguridad vial “sea política de Estado”


Tras el trágico accidente que tuvo lugar en la tarde del domingo en Mendoza y que dejó quince personas fallecidas, la mayoría menores de edad, desde la ONG Luchemos por la Vida advirtieron a Info Región que “la seguridad vial” sigue sin tomarse como “una política de Estado” en el país.

“Lamentablemente siguen muriendo argentinos, por eso decimos que cada uno debe cuidarse porque el Estado no nos está cuidando”, señaló Alberto Gasparini, que es docente y colaborador de la Asociación Civil.

En ese marco, criticó las medidas tomadas hasta entonces en materia de educación vial y la escasez de controles en las rutas. “No se ha tomado como política de Estado la seguridad vial. Lamentablemente si uno sale a la calle ve los pocos controles de alcoholemia que hay, el poco uso del cinturón de seguridad, del casco, los casi nulos controles de velocidad”, indicó.

En ese marco, confirmó que desde hace años se mantiene la tasa de 20 personas fallecidas por día a causa de siniestros viales. Es por eso que remarcó la importancia de la concientización por parte de los conductores y afirmó que “las campañas deben ser permanentes para que la gente tenga conciencia”.

De hecho, reflexionó que, de haber existido conciencia sobre los riesgos, en el micro de la tragedia “alguno le habría dicho al conductor que estaba andando fuerte, pero aparentemente nadie hizo nada para desalentar al conductor”.

En otro orden, criticó la leve penalización hacia los conductores que infringen las leyes. “Los que cometen grandes desastres o matan personas terminan, en casos, manteniendo el registro de conductor, y algunos sueltos. No hay un castigo contundente para aquellos que transgreden, por lo tanto son un mal ejemplo para que otro haga lo mismo”, reflexionó.

La única esperanza manifestada por Gasparini va en relación con que no haya aumentado el número de muertes en relación al incremento del parque automotor: “En los últimos diez años la cantidad de vehículos aumentó un treinta o cuarenta por ciento y la cantidad de muertos no se disparó en la misma cantidad”.