Pericias psiquiátricas descartaron que Villalba sufra delirios místicos


Marcelo Villalba, de 40 años, fue detenido el miércoles luego de que la Justicia determinara que, en circunstancias que aún se desconocen, tuvo en su poder el celular de Anahí Benítez y se lo regaló a su hijo de 17 años. Fuentes judiciales revelaron a Info Región que, previo a que el jueves se negara a declarar, se le efectuó una pericia psiquiátrica que determinó que “no sufre delirios místicos”, tal como había advertido su ex mujer.

Conforme a lo estipulado en el Código Penal, una vez comprobado que el imputado no padecía problemas psíquicos, se llevó a cabo la audiencia en la que se negó a declarar ante los fiscales a cargo de la causa, por lo que seguirá detenido mientras continúe la investigación “a la espera de las pericias toxicológicas, de ADN y las declaraciones”, precisaron fuentes judiciales a este medio.

Villalba está imputado por “encubrimiento agravado”. Es que, en el marco de la investigación por el crimen de Anahí Benítez, la policía encontró la carcasa del celular de la víctima en un terreno baldío lindante al fondo de su casa, ubicada en Oliden al 1200. El hombre le había regalado el teléfono en cuestión a su hijo, que activó el aparato con un nuevo chip y fue detectado por los investigadores de la causa en una vivienda sobre la calle Jorge, a 500 metros de la Reserva donde fue hallado el cuerpo de la adolescente.

Mientras tanto, familiares de Marcos Bazán, el otro detenido acusado del asesinato de la chica, realizaron ayer otra marcha para exigir su liberación.

LGO de la Redacción de Info Región.