Borges, a diez años del Mundial: “Fue mi mejor momento”


El 19 de octubre de 2007 es una fecha que continuará grabada en la historia grande del rugby argentino. Aquella jornada, los Pumas coronaron el Mundial desarrollado en Francia con un recordado tercer puesto, luego de vencer 34-10 al dueño de casa, por segunda vez en la competencia.

El wing surgido en Pucará Lucas Borges fue parte destacada de aquel conjunto nacional, a tal punto que disputó cinco partidos y anotó tres tries, dos de los cuales fueron ante Georgia (victoria 33-3) y el restante en un encuentro clave de la fase de grupos, frente a Irlanda (triunfo 30-15).

En esa línea, el back rememoró junto a Info Región lo vivido en la Copa del Mundo: “Si tengo que elegir un momento en mi carrera, el mejor fue durante el certamen. Tuve la suerte de jugar con ese plantel tan importante, así que viví los instantes más valiosos de mi trayecto como jugador”.

“Éramos un equipo que sabía a lo que jugaba y tenía solidez en las bases de su propuesta, ya sea en las formaciones fijas, defensivamente, mientras que en ataque apostaba al error del contrario como parte de la definición. La calidad individual también ayudaba a que estos aspectos se resolvieran con facilidad”, explicó el back con pasado en Stade Français.



El torneo

El seleccionado argentino integró el Grupo D junto con los dueños de casa, Irlanda, Georgia y Namibia, en lo que se presentaba como un escollo difícil de superar. Sin embargo, el rendimiento de los albicelestes superó las expectativas, por lo que accedieron a cuartos de final con cuatro triunfos en igual cantidad de presentaciones.

A la hora de dimensionar lo realizado, Borges señaló: “Queda en evidencia que fue un logro histórico por la dificultad que sigue presentando el hecho de ganarle a los equipos que vencimos. Dejamos un recuerdo importante para todos”.

Más allá de la sorpresa que significaron los resultados, el wing recordó lo aceitado que llegó el plantel a la máxima cita internacional: “La idea era realizar un torneo importante, veníamos en buen nivel durante los cuatros años anteriores y había capacidad como para pretender algo más. La realidad indicaba que la zona tenía tres equipos fuertes de los cuales uno quedaría en el camino, incluyendo al local, y se pasó de la mejor manera, confirmando que estábamos para algo grande”.

“El primer cruce ante Francia (victoria 17-12) fue clave para demostrar, porque una cosa es hacerle partido a los grandes y estar cerca, pero otra es vencer al dueño de casa en el partido inaugural. Evidentemente, fue un empujón muy grande para lo que teníamos por delante”, comentó el back.

Ya instalados entre los ocho mejores del Mundial, el conjunto dirigido por Marcelo Loffreda sostuvo su rendimiento y doblegó 19-13 a Escocia para acceder a las semifinales, en donde su marcha sería detenida por la jerarquía de Sudáfrica (luego se consagraron campeones), que lo vencieron 37-13.

Sin embargo, la gesta argentina no tuvo como punto final la caída frente los Spingboks. El cruce por el tercer puesto le puso a Francia, nuevamente, en el camino, y los Pumas aprovecharon para coronar su participación histórica con un nuevo triunfo sobre el conjunto galo, lo que le permitió subirse al podio y cerrar la mejor actuación en un torneo de ese tipo hasta la actualidad.

“Cuando se perdió la semifinal daba la sensación que el Mundial estaba terminado y el siguiente partido no tenía interés, pero en el momento de jugarlo, y de la manera que lo afrontamos, quedó en evidencia que no era lo mismo salir cuartos que terceros. Para el grupo fue un encuentro importante y quedará en la memoria”, expresó el wing surgido del Rojo.



Influencia a futuro

En una época que se discutía sobre los méritos del seleccionado albiceleste como para integrar el por entonces denominado Tres Naciones (Sudáfrica, Nueva Zelanda y Australia), un paso destacado como el que tuvo por el Mundial significó un espaldarazo importante para la inclusión en el actual Rugby Championship, como así también para la presencia de los Jaguares en el Súper Rugby.

“Nuestra actuación, y lo generado por el equipo, demostró que Argentina debía estar en alguna competencia anual. Se buscó la forma y finalmente se consiguió, pero el respaldo de ese gran Mundial llevó a que la negociación fuera más fácil para los dirigentes”, finalizó Borges, en diálogo con Info Región.



Gonzalo Rivera.