El vocero de la Armada, Enrique Balbi, explicó que se investigaron 400 señales y no pertenecen a la nave perdida. Balbi dijo también que la meteorología dificulta rastrillar el área y el contacto visual es limitado, aunque la situación mejoraría mañana. Participan de la búsqueda más de 13 buques de distintas nacionalidades y 10 aviones.
Además, aseguró que "no se descarta ninguna hipótesis" respecto de qué pudo haber pasado con el submarino y explicó que éste se encuentra preparado para subsistir 90 días, "en condiciones normales" aunque necesita "salir a la superficie a buscar oxígeno mínimo cada 3 días".
La última comunicación con el submarino fue el miércoles pasado cuando se encontraba a 430 km de la costa en el Golfo de San Jorge, en el Atlántico Sur, y se dirigía desde Ushuaia hacia Mar del Plata. Este lunes debería haber arribado a esa ciudad.
Reportó una avería. La Armada también confirmó oficialmente que el submarino ARA San Juan había comunicado a la base naval "una avería" en las baterías. La información fue difundida por el capitán de navío Gabriel Galeazzi, vocero de la fuerza en Mar del Plata.
"El día miércoles se informó este principio de avería, por eso se cambió la derrota (la ruta del buque) y se lo pone rumbo a Mar del Plata", informó Galeazzi.
El inconveniente técnico estaba vinculado con problema en los circuitos de las batería, las cuales habían sido renovadas en su totalidad en 2014, cuando la unidad fue reparada por el Ministerio de Defensa.
Las baterías son indispensables para la propulsión del submarino en profundidad, no así para que la nave emerja. Las mismas se recargan en superficie, a través de un generador que es impulsado especialmente por el motor del buque. Un cortocircuito en las baterías puede provocar un incendio, cuya magnitud depende de distintas circunstancias.
Confirman que los intentos de comunicación no eran del ARA San Juan
