Macri evalúa sancionar la reforma previsional por DNU


Luego del fracaso en la sesión extraordinaria convocada en Diputados para tratar la reforma previsional, el presidente Mauricio Macri se reunió con los ministros de su gabinete y los presidentes de los interbloques parlamentarios de Cambiemos para evaluar la sanción del proyecto por decreto de necesidad y urgencia (DNU).

A los pocos minutos de que se conociera la posibilidad de que el Presidente sancione la reforma por decreto, la líder de la Coalición Cívica y una de las principales referentes de Cambiemos, Elisa Carrió, adelantó a través de Twitter su rechazo a la medida.





También desde la CGT anticiparon que convocarán a un paro para este viernes si el Gobierno sanciona la reforma previsional por decreto de necesidad y urgencia.

Lo anunciaron los integrantes del triunvirato cegetista: Héctor Daer, Juan Carlos Schmid y Carlos Acuña durante una conferencia de prensa, en una pausa del encuentro del consejo directivo, que se inició a las 18, y continuará en sesión permanente, en espera de una decisión del Gobierno.

Daer precisó que la CGT "va a esperar a ver que sucede y sería lamentable que cuando la política del Congreso les dijo no a este reforma se utilice el DNU para generar este acto de sustracción de los salarios a los jubilados".

Fallida sesión. En medio de una fuerte polémica y graves incidentes, adentro y afuera del recinto, fue levantada la sesión en Diputados en la que se pretendía convalidar la reforma previsional, que ya tiene media sanción del Senado.

A las 14 sonó la chicharra que daba inicio al encuentro legislativo, mientras que frente al Congreso se vivieron escenas de pánico. Es que los manifestantes, entre ellos dirigentes, organizaciones sociales y trabajadores, fueron reprimidos con gases lacrimógenos y camiones hidrantes.

Mientras tanto, al interior del recinto también hubo caos ya que el oficialismo alegó haber conseguido el número para sesionar, mientras que la oposición denunció a los gritos que los 129 diputados se sentaron luego de transcurrida la media hora que establece el reglamento.

Entre gritos, chicanas y empujones, varios diputados lograron arrebatarle el micrófono al presidente de la Cámara baja, Emilio Monzó. Diputadas como Victoria Donda y Graciela Camaño pidieron a voz alzada levantar el debate con motivo de que había legisladores en enfermería tras la represión frente al Parlamento.

También repudiaron las agresiones que recibieron de Gendarmería en el abrazo simbólico que realizaron ayer al Congreso en repudio a la reforma, en el marco de la cual el diputado Leonardo Grosso recibió el impacto de una bala de goma y la propia Donda fue herida en un tobillo.

Finalmente, fue Carrió la que le pidió a Monzó levantar el debate, tras asegurar que el oficialismo tendrá la oportunidad de aprobar la reforma en otra oportunidad.