Casi una copia fiel de lo que sucedió el jueves. Así era la situación este lunes, mientras la Cámara de Diputados discutía la reforma previsional, entre otros proyectos enviados por el Ejecutivo. Los incidentes, que comenzaron a las 14, continuaban pasadas las 18.
Minutos antes del arranque de la sesión extraordinaria en Diputados, manifestantes comenzaron a arrojar piedrazos, botellas y bombas de estruendo frente al Congreso. La violencia se infiltró en la marcha en la que trabajadores, jubilados y movimientos sociales piden por la no sanción de la Reforma previsional, que modifica el cálculo de movilidad jubilatoria. 
El foco, en sintonía con lo que sucedió el pasado jueves, era frente a la Plaza de los Dos Congresos, pero continuó hacia la avenida 9 de Julio. Los carros hidrantes, y los policías con escudos, armas con postas de goma y gases lacrimógenos, continuaban actuando pese a que la mayoría de los manifestantes se retiró del centro porteño.
Mientras tanto, los cruces continuaban en Diputados. De hecho, hubo un cuarto intermedio para intentar frenar la violencia en las afueras, pero la situación continuó por el mismo carril. Desde la oposición reclaman que se suspenda nuevamente la sesión, pero el oficialismo insiste con trabar el tema: “Esta ley reparó lo que ustedes no hicieron. Perdieron muchachos, no se gana con violencia lo que se perdió en las urnas”, esgrimió Elisa Carrió en el recinto, provocando más e intensos cruces.
Desde distintos bloques, en tanto, volvieron a poner en foco la represión que se registraba en el centro porteño. “Nos dicen que nosotros somos los causantes del clima que se generó acá dentro (el pasado jueves). Este clima lo generaron ustedes, no nosotros”, sentenció Agustín Rossi, quien apuntó: “Repudiamos la represión indiscriminada del Estado nacional a los ciudadanos que se manifiestan en contra de las políticas del Gobierno”.
Son decenas los detenidos, pero no había confirmación oficial de las identidades. Correpi difundió una lista y algunos espacios políticos replicaban otras nóminas.
Más de seis horas de incidentes: hay decenas de detenidos
