“No hay reconciliación con los crímenes que se cometieron”


La presidenta de Madres de Plaza de Mayo e integrante de la Comisión Provincial por la Memoria (CPM), Nora Cortiñas, cuestionó al titular del bloque PRO en Diputados, Nicolás Massot, por pedir “reconciliación con los años 70”, y remarcó que “no hay perdón” para los dictadores.

“De ninguna manera hay reconciliación con los crímenes horrendos que se cometieron. Sólo cárcel efectiva y todo el tiempo que requieran por esos crímenes que cometieron. No hay perdón, no hay olvido. No hay venganza para nada, simplemente tiene que haber toda la verdad y toda la justicia”, replicó Cortiñas, en diálogo con Info Región, aludiendo a los dichos de Massot.

El diputado del PRO sostuvo que “lo más importante es poder cerrar los capítulos para poder avanzar como sociedad" y consideró que “con los años 70 hay que hacer como en Sudáfrica y llamar a la reconciliación”, lo cual “implica no sólo memoria, justicia y verdad”, sino también “perdón”. Cortiñas insistió en no es posible ya que “nadie se arrepintió, todos lo volverían a hacer”.

Además, cuestionó a la Justicia por otorgar el beneficio de la prisión domiciliaria para los “genocidas” del último golpe cívico-militar. “No se puede permitir, en este país tienen que poder caminar sin impunidad, sin los genocidas libres, que además son peligrosísimos”, por lo que el 1 de febrero, cuando finalice la feria judicial, los organismos de Derechos Humanos presentarán un pedido para que ·se le revoque la prisión domiciliaria a (Miguel) Etchecolatz y a otros genocidas”, adelantó Cortiñas.

“El Gobierno y la Justicia tienen que optar por respetar que son crímenes horrendos de lesa humanidad: apropiación de bebés sacándoles la identidad, los vuelos de la muerte echando al mar y al río a gente viva, dopada o adormecida. Todos los crímenes y torturas que se cometieron contra hombres, mujeres, niños. No pueden quedar en libertad y en la impunidad. Esperamos que la Justicia entienda esto prontamente”, reclamó la titular de la Línea Fundadora.

En cuanto a los escraches públicos que se realizaron en Mar del Plata desde que el genocida Etchecolatz se mudó allí para cumplir con la domiciliaria, incluído el del domingo, destacó que “es importante que la gente haya repudiado como lo hizo, los vecinos tienen bien claro que no quieren vivir al lado de un genocida", y esto “es lo que se merece”.

Homenaje a Aramburu. “Espantoso”. Así calificó Cortiñas el homenaje al dictador de la Revolución Libertadora Pedro Eugenio Aramburu incorporado en la muestra permanente del Museo Casa Rosada, por el cual se expusieron objetos suyos y se lo reivindicó como “presidente”. Además, en una muestra llamada “La república condicionada”, se menciona a Jorge Rafael Videla como un presidente constitucional más, “al lado de (Arturo) Illia y (Raúl) Alfonsín”, entre otros jefes de Estado del período 1955-1983, sin especificar que tanto Videla como Aramburu “fueron dictadores”.

“Son cosas que muestran la ideología y la falta de moral de los funcionarios que programan y llevan a cabo esto. Le decimos al Presidente que empiece a mirar y a tener diálogo con el pueblo y que sepa que no queremos evitar tiempos que hemos vivido de terrorismo de Estado. No queremos ni pensar en esas actitudes de equiparación de presidentes democráticos con dictadores. Yo creo que el Presidente ya tiene que pensar en compartir todos los ideales que tenemos después de haber estado años y años buscando toda la verdad y toda la justicia”, concluyó la referente de la lucha por los Derechos Humanos.

Martina Jaureguy