“El Gobierno usa la falta de transparencia para atacar a los sindicatos”


El secretario general de la Asociación Judicial Bonaerense (AJB), Pablo Abramovich, cuestionó un “ataque” del Gobierno al sindicalismo y denunció que “las políticas que intenta llevar a cabo requieren que no haya sindicatos fuertes para enfrentarlas”.

“Son políticas que avanzan sobre los derechos de los trabajadores, y creemos que desde diciembre del 2015 este Gobierno ha decidido desarticular, debilitar, atacar a las organizaciones sindicales”, explicó Abramovich. “Esto no quita que el Gobierno aproveche, como parte de su estrategia, algunos puntos débiles que tiene el movimiento sindical en la figura de algunos dirigentes que tienen cuestiones que no pueden explicar, ingresos que no pueden justificar”, apuntó.

Si bien el dirigente de AJB se despegó de “la falta de transparencia o de democracia de muchas organizaciones sindicales de las cuales se vale el Gobierno para fortalecerse en su avanzada”, remarcó que trata de “instalar” que casos como los de Marcelo Balcedo, del SOEME, u Omar “Caballo” Suárez, del SOMU, “son la regla en el sindicalismo”. Y replicó: “La regla es que los sindicatos son honestos, trabajadores, representativos, pero lamentablemente no es así en todos los casos y los que no lo son tendrán que rendir cuentas a los afiliados”.

En este sentido, remarcó que “el Gobierno tiene que respetar la autonomía de los sindicatos” y advirtió que “todo el proceso de intervenciones, e inmiscuirse en las organizaciones sindicales se inscribe en esta política de avasallamiento para dejar avanzar las políticas de ajuste que el Gobierno necesita y que no pueden avanzar con sindicatos que se le opongan”.

De todos modos, criticó a ciertos sectores sindicales y dirigentes “sumamente cuestionados por permitir que gran parte de las políticas que avanzaron sobre los derechos de los trabajadores hayan avanzado con acuerdos de gobernabilidad”, y en esta línea apuntó contra la CGT: “Su cúpula sin duda ha tenido un compromiso fuerte en este sentido de garantizarle gobernabilidad al Gobierno”.

Paritarias. El gremio aún no fue convocado, aunque tienen pactado como fecha límite el 15 de marzo para comenzar a negociar. Abramovich adelantó que espera una convocatoria cercana a esa fecha ya que “el Gobierno siempre intenta acordar antes la paritaria docente”, pero, si ésta se adelanta, ellos pedirán un adelanto también.

“Nosotros no aceptamos que tengamos una paritaria condicionada por el resultado de otras paritarias, porque en ese caso no tendríamos una negociación libre”, explicó. “El año pasado la gobernadora acordó el 18 por ciento con algunos gremios y después quiso imponernos eso al resto. En nuestra paritaria, que es independiente, no aceptamos que esté condicionada por el resultado de otras, porque no tendríamos capacidad de negociación. Quedaríamos limitados por lo que arreglan otros gremios que no representan a los judiciales”, sentenció.

Abramovich adelantó que exigirán un aumento “por arriba del 20 por ciento” y la implementación de la cláusula gatillo, al igual que el año pasado. “Los judiciales la vamos a reclamar pero es muy probable que sea parte de la discusión con el Gobierno, más allá de que digan que no la van a incorporar, porque el año pasado funcionó favorablemente para no perder tanto poder adquisitivo”, destacó.

Además, los judiciales se encuentran en una situación de “tensión” y “conflicto” con la Corte Suprema desde el año pasado ya que se les descontaron del sueldo los días en que estuvieron de paro. “El compromiso de la Corte era reintegrarlos una vez resuelto el conflicto salarial y nunca lo hizo. Eso seguramente va a atravesar la discusión a partir de febrero o marzo cuando se reanude el conflicto salarial”, explicó a este medio. Abramovich señaló esto como “un alineamiento de la Corte con las políticas de ajuste y de ataque a las organizaciones sindicales que viene llevando adelante la gobernadora”, María Eugenia Vidal.

MJ dela Redacción de Info Región