Como hace cuatro años, una tragedia aérea conmovió ayer Lomas de Zamora poco después de las 19.30, cuando una aeronave liviana se precipitó a tierra provocando la muerte inmediata de cuatro personas. La avioneta, que presuntamente había partido del Centro Universitario de Aviación, se estrelló en las inmediaciones de la laguna de Santa Catalina, en un predio propiedad de la empresa Covelia que tiene acceso por la avenida Juan XXIII.
Los bomberos de Lomas de Zamora y personal policial de la comisaría de Parque Barón, con jurisdicción en la zona, montaron rápidamente un amplio operativo en el lugar, que incluyó la asistencia de ambulancias municipales, aunque rápidamente se percataron de que no había sobrevivientes y se retiraron del lugar.
Las ambulancias se retiraron temprano, sin heridos
El sitio del accidente es un descampado al que solo se accede a través del acceso abierto por la empresa Covelia, que hace pocos años adquirió a la Universidad de la Plata el campo lindero a la Universidad Nacional de Lomas de Zamora.
Zona de bañados y profusa vegetación, el lugar donde cayó el avión, un Cessna 172 de cuatro plazas, monomotor, resultó de difícil acceso para rescatistas y permaneció cerrado para los medios.
De todos modos, la guardia en el lugar permitió observar tareas de levantamiento de rastros, a cargo de personal especializado, hasta la madrugada.
El 9 de enero de 2008, a pocos metros del lugar, se había producido otro accidente trágico cuando se estrelló una avioneta conducida por un instructor de Lanús, acompañado por su hijo, de 17 años. Ya en ese entonces los vecinos del lugar daban cuenta del tráfico incesantes de avionetas que despegan del aeródromo de Camino de Cintura y Richieri en vuelos de instrucción y que en algunos casos se destacan por sus maniobras temerarias.
Cuatro personas murieron en un accidente de avioneta
