Con la declaración de nuevos testigos, continuó este martes el juicio a Martín Romañach, acusado por la muerte de Ornella Ragno. Declararon dos peritos, uno forense y otro psiquiatra, y la exposición de ambos complicó al imputado.
El fiscal Pablo Rossi amplió la acusación a Romañach porque considera que eran pareja al momento de su muerte. Es juzgado, entonces, por “homicidio agravado por el vínculo y por mediar la violencia de género”. La defensa, frente a este cambio, rechazó postergar el juicio para diagramar una nueva estrategia.
El Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 7 del Departamento Judicial de Lomas de Zamora escuchó las exposiciones de los peritos. Por un lado, declaró el médico forense Sebastián Gabriel Díaz, quien evaluó que Ornella presentaba “lesiones apergaminadas (producidas por la acción de cuerpos duros) en la parte izquierda del rostro, el pecho y abdomen”, pero no en manos y palmas. La presunción es que la joven ya estaba inconsciente cuando cayó del octavo piso porque intentar protegerse “es un acto reflejo ante un eventual peligro”.
La exposición de Sebastián Pablo Scar, perito psiquiatra, también complicó la situación del acusado porque su diagnóstico es que Romañach tiene una personalidad “anti social, con rasgos narcisistas”; y aunque no afirmó que pudiera ser peligrosa para terceros, no descartó esa posibilidad.
Por su parte, el ingeniero mecánico de la Asesoría Departamental, quien analizó las imágenes fotográficas de la terraza, no pudo afirmar con certeza que Ragno cayó por perder el equilibrio, tal como había señalado el imputado en la primera audiencia.
LGO de la Redacción de Info Región
El fiscal amplió la acusación a Martín Romañach
