En el evento diocesano más convocante del año, el obispo de la Diócesis de Lomas de Zamora, Jorge Lugones, encabezó ayer la tradicional peregrinación de Corpus Christi a la catedral Nuestra Señora de la Paz.
Minutos después de las 15, Lugones ofreció una misa en el microestadio del Parque Municipal. Durante su discurso, ante miles de fieles, Lugones destacó la importancia de la sinodalidad; es decir, la importancia “de caminar juntos”. “Tendamos la mesa de la sinodalidad entre nosotros. Caminar juntos es un signo vital hoy en día en la iglesia. Solo desde la fuerza de la Eucaristía podremos hacer fuerzas en este camino”, destacó el también presidente de la Comisión Episcopal de Pastoral Social. “Sabemos que aún en las dificultades, el espíritu de Jesús está con nosotros”, agregó.
Cerca de las 17, comenzó la tradicional procesión con el Santísimo Sacramento desde el parque hasta la catedral Nuestra Señora de la Paz, frente a la plaza Victorio Grigera. “Venimos todos los años con la familia para agradecerle a Dios por todo lo que nos da y a celebrar la Eucaristía con esta gran comunidad”, expresó a Info Región Marcela, vecina de 9 de Abril.
Durante el recorrido de casi 30 cuadras, los fieles cantaron las clásicas canciones de Iglesia, escucharon mensajes del Papa Francisco y los oradores hicieron hincapié en el rechazo por parte de la iglesia a la despenalización del aborto bajo el lema "valen las dos vidas". “No nos callamos, vale toda vida. Estamos defendiendo la vida del niño por nacer. Tenemos que apreciar y cuidar la vida que viene, sea cual sea la circunstancia”, manifestó uno de los oradores desde arriba del camión que encabezó la caravana.
FMSM de la redacción de Info Región
Con un férreo rechazo al aborto, celebraron el Corpus Christi
