Comenzó el juicio por la muerte de Érica: declaró Lagostena


El Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 9 del Departamento Judicial de Lomas de Zamora comenzó hoy a juzgar a Daniel Lagostena, por el crimen de Érica Soriano. De la mujer no se sabe nada desde el 20 de agosto de 2018 y durante la primera jornada, el acusado aseguró que tenían una relación “normal”.

Lagostena, acusado de “homicidio en concurso ideal con aborto en contexto de violencia de género”, aseguró que no había conflictos con Érica y la convivencia era “normal”. Al ser consultado por los mails, que daban cuenta de un deseo de separarse de Érica, negó que fuera celoso.

El abogado de la familia de Érica, Marcelo Mazzeo, dijo que confía que en el juicio surgirán los nombres de las personas que pudieron haber colaborado con el imputado.

“El cuerpo de mi hija no está, pero tenemos el cuerpo del delito y eso es lo importante. No tengo idea de dónde está pero a Érica la tengo en el corazón”, expresó Esther Soriano, la mamá de Érica. Aclaró que “no confía” en la Justicia sino que “será lo que Dios quiera que sea”, al hablar con la prensa en la puerta de los Tribunales de Lomas de Zamora.

El juicio continuará este martes. Se espera que pasen más de 60 testigos durante las audiencias, previstas para el 5, 6, 7, 8, 11, 12, 13, 14 y 15 de junio.

El caso. La familia denunció la desaparición de la mujer el 21 de agosto de 2010. Es que la pareja de Érica, quien estaba embarazada de poco más de dos meses y ya tenía una hija, señaló que la joven había salido ese día de la casa que compartían en Lanús, ubicada en Coronel Santiago 1433 de Lanús, para visitar a su madre, pero nunca llegó a destino. Érica fue buscada por tierra, agua y “puerta a puerta”, en el cementerio de Lanús, la casa en la que vivía y viviendas de familiares de Lagostena.

Mientras avanzaba la investigación y desaparecía la esperanza de hallar a Érica con vida, Lagostena fue detenido. A finales de 2012, el juez Gabriel Vitale había resuelto que el acusado por “homicidio y aborto en el contexto de violencia familiar” seguiría detenido; esto fue luego de que la Cámara de Apelaciones anulara la prisión preventiva por error técnico. Es que se lo indagó por el delito de “privación de la libertad seguido de muerte” y la prisión preventiva era por otra carátula. Años pasaron desde ese momento hasta que Lagostena volvió a estar tras las rejas, en 2016.

Los investigadores determinaron que en la tarde del 20 de agosto de 2010, la pareja fue al ginecólogo y a las 22.13 Érica recibió el llamado de una amiga y le dijo que estaba yendo con su pareja hacia su casa en auto. Esta llamada telefónica fue el último contacto que se tuvo de la mujer con su entorno social. Cerca de la medianoche, Lagostena comenzó a intercambiar mensajes y a las 5 hubo llamadas, que llamaron la atención de los investigadores porque no era habitual el uso horario ni el patrón de comunicación. Creen que en ese horario, hicieron desaparecer el cuerpo de la joven embarazada de dos meses y medio.

LGO de la Redacción de Info Región