Vecinos de Turdera piden el reservorio hídrico en Finky


El campo Finky, de Turdera, recibe cada fin de semana a decenas de vecinos de la Región; y la asamblea que logró convertir un basural en eso sigue reclamando la construcción del reservorio hídrico. El objetivo es que las zonas que habitualmente se inundan, no sufran anegamientos y que el agua vaya a parar allí.

“Provocamos acciones vecinas en post de gestionar avances para tener una mejor calidad de vida: Ya vemos que la flora y la fauna cambio luego de que 1200 árboles fueran plantados y que donde antes venían 100 personas hoy vienen cerca de 10 mil”, destacó entre los avances Alejandro Almeida, miembro de la Asamblea Finky Verde.

Además, comentó que el parque era antes un terreno que se usaba como basural y que a través de luchas vecinales fue poco a poco convirtiéndose en lo que es hoy. Tras destacar los logros del trabajo vecinal, planteó un desafío que sigue vigente: la creación de un reservorio hídrico.

Entre las construcciones pendientes esta la creación del reservorio hídrico, un paliativo para evacuar el agua que inunda las calles aledañas al parque y que ingresa a los hogares de los vecinos de Turdera cuando llueve.







Liliana Montanini vive en Temperley hace 40 años, el mismo tiempo que hace que se le inunda la casa. “Nosotros vivimos las imágenes de la inundación de La Plata sin necesidad de lluvias extraordinarias, así que estamos viendo si avanza la creación del reservorio para acabar con la desazón, la bronca y las tristeza que nos da perder nuestras cosas”, expresó la lomense.

“Lo que hay que hacer es mover 10 metros cúbicos de tierra para que 10 metros cúbicos de agua se estacionen en ese lugar y no en las casas de la gente y se beneficiarían todos los vecino de Lomas”, explicó Almeida.

A pedido de los vecinos y las asambleas, se está avanzando en temáticas culturales, ya que consta de un anfiteatro con una capacidad para 450 personas sentadas, que puede llegar hasta mil por los espacios entre las gradas. “No es el parque final, ya que deseamos ampliarlo y avanzar en temáticas culturales, como que se dicten clases de música, danza y teatro”, contó Almeida. “Procuramos que algún día venga el doble de gente y que sea un espacio cultural y deportivo que sea delegado a las futuras generaciones”, agregó.

En noviembre de 2010, vecinos y asambleístas plantaron más de 1200 árboles autóctonos en el predio regidos por dos objetivos: parquizar el predio e impulsar que se conozcan las especies locales. Familias enteras se acercaron al espacio verde y participaron del evento. Hoy, son muchos los que esperan la construcción del reservorio.