La Parroquia San Francisco de Asís, una belleza arquitectónica


Casas bajas, plazas y la parroquia San Francisco de Asís. Llavallol cuenta con una belleza arquitectónica de la cual muchos no saben, pero es admirada por todos aquellos que la descubren en algún paseo y por quienes a diario pasan por la puerta. Las miradas de todos se posan en esta construcción de cúpulas en punta y ventanales alargados.

Los inicios de la parroquia San Francisco de Asís se remontan a principios del siglo XX, cuando se formó el primer grupo de población en relación a la fundación del Colegio Euskal- Echea en el 1904. Allí se construyó una capilla donde los Padres Capuchinos atendían los servicios religiosos. En el año 1944 se edificó la Iglesia Parroquial con un estilo gótico y, a medida que el pueblo fue creciendo, la fe se radicó en él.

A medida que Llavallol fue creciendo a lo largo de las décadas, el lugar se convirtió en un centro masivo de encuentro. Este cambio supuso un desafío para los integrantes de la parroquia, que debieron adoptar medidas para poder integrar al número creciente de fieles que se acercaban habitualmente.

El santo que fue elegido para la denominación de la parroquia de Llavallol, para todos los integrantes del lugar, una figura “que cada vez se hace más fuerte”, simbolizando la “pobreza y la búsqueda de la sencillez”.



La elección de Jorge Bergoglio por el nombre de este Santo indica un motivo de alegría para los integrantes de la parroquia y los vecinos que allí concurren. Según indicó el sacerdote de la parroquia, el Papa “estaba planteando algo con la elección del nombre Francisco” y este hecho supone una “gran alegría” para todos los fieles que concurren a la parroquia.

Con la misión de acercar la religión y la fe a todas las familias de Llavallol, la parroquia San Francisco de Asís, ubicada entre Luzuriaga y Moldes, continúa con su labor a la comunidad y asumiendo un compromiso de ayuda a quienes más lo necesitan. A medida que los años pasaron desde su fundación, la parroquia continúa acogiendo a una gran cantidad de personas que concurren allí habitualmente.

Son muchas las actividades que realizan dentro de la Iglesia, cuyo objetivo es brindar espacios de recreación y solidaridad a los vecinos. Según el padre (NOMBRE) u, el lugar tiene la particularidad de ser una parroquia que ha sufrido “nuevos planteos” que permiten la integración y la diversidad de las personas que asisten con frecuencia. Además, se busca la participación de instituciones para el bien común.

Uno de los lugares que poseen más colaboración de los integrantes de la parroquia son los comedores de la zona, que reciben comida y prendas todos los meses. Según un sacerdote, los vecinos se solidarizaron con la iniciativa y colaboraron con todos los recursos que poseían a mano. Algunos de ellos ofreciendo sus vehículos para el transporte de mercadería y otros ayudando con alguna donación.

Además, se realizan misas dedicadas; un ejemplo es la del Día de la Mujer, fecha en la que se entregan distinciones y rinden homenajes a mujeres ilustres y destacadas de la localidad. Por otra parte, se suman los integrantes de movimientos juveniles que realizan retiros, acampadas y distintas excursiones con el objetivo de integrar a los jóvenes a la religión.

El padre (NOMBRE) aseguró, en diálogo con Info Región, que la iglesia “reformuló algunos gestos” para los más chicos “puedan entender la Iglesia de otra forma”.

“La calidez de la gente es una característica muy propia en la idiosincrasia de la gente de Llavallol”, remarcó. “Hay un núcleo de gente que se conoce, es un lugar sencillo y conserva muchas tradiciones propias de los pueblos, no tiene mucho que ver con la ciudad”, completó.

Y el crecimiento de la parroquia va al mismo ritmo que la belleza de la estructura. Actualmente, el movimiento juvenil que funciona y desarrolla sus actividades dentro del lugar está integrado por alrededor de 250 chicos que participan activamente de todos los eventos que se organizan. Además, desde la parroquia aseguraron que el número de bautismos y casamientos aumentó considerablemente durante los últimos años, suponiendo un motivo de alegría para sus integrantes.

San Francisco de Asís. Nació en el año 1182, hijo de una familia rica comerciantes de telas. Poco se conoce de su infancia y su juventud era una época de conflictos y rivalidades. En la guerra, Francisco cae prisionero y nuevamente libre niega a su familia, renuncia a su riqueza y regresa a Asís para dedicar su vida a Dios. Murió en el año 1226 producto de enfermedades que padecía y que se agravaron tras la aparición de estigmas en sus manos y pies, claras señales de la pasión de Jesús. El 16 de julio de 1228 fue canonizado por el Papa Gregorio IX. Hoy, el Papa eligió el nombre de Francisco para rendirle homenaje y seguir su legado: una Iglesia para los pobres.