Nueva polémica en torno a la sede del PJ en Brown


La polémica en torno a la situación de la sede del Partido Justicialista sumó otro capítulo luego de que su fachada fuera tapiada. Desde el Frente para la Victoria, actualmente a cargo de la conducción, volvieron a criticar al ex intendente y líder del Frente Renovador local, Darío Giustozzi.

“De la fachada tapiada, el responsable es el que mandó a hacer un museo. Sigue siendo una grosería política. Pero grosera, bien grosera”, criticó el concejal kirchnerista Ignacio Villaronga en diálogo con Info Región.

La controversia entre el kirchnerismo y el massismo de Brown comenzó a fines de febrero pasado, cuando en medio de una polémica sesión extraordinaria del Concejo Deliberante, el Ejecutivo Municipal presentó un proyecto de ordenanza declarando sujeto de expropiación a la sede del PJ comprada por los afiliados hace veinte años con el objetivo de que en ese lugar se construya el “Museo Presidente Perón”.

La iniciativa, que fue rechazada en duros términos por el Frente para la Victoria, fue aprobada por la mayoría del massismo. La nueva conducción del PJ, que encabeza el concejal del FpV Juan Fabiani, llevó su reclamo a la Justicia y el Juzgado de Responsabilidad Juvenil N° 1 de Lomas de Zamora dio lugar a la medida de no innovar y dispuso frenar cualquier acción sobre el inmueble.

Ahora, luego de que la sede fuera tapiada, Villaronga insistió en que “el responsable del desastre es Giustozzi”. “No me atrevería a pensar que (Daniel) Bollettieri, de extracción radical, está expropiando, para hacer un museo de la casa del peronismo”, señaló.

En este marco, recalcó que desde el FpV están “yendo por el camino legal” para recuperar la sede. “Vamos a estar ahí, dándole el funcionamiento que no tuvo en los últimos años que es el de formación, de militancia, de acompañamiento a un gobierno con el que nos sentimos representados”, completó.

Sobre el paro general

Por otra parte, Villaronga evaluó el paro general que se realizó la semana pasada convocado por los centrales obreras opositoras y consideró que la medida de fuerza “no fue una demanda genuina del trabajador a sus dirigentes”.

“No es un reclamo del sector que los dirigentes escucharon y llevaron adelante. Fue al revés, fue un reclamo de los dirigentes que partieron de que el trabajador iba a estar de acuerdo cuando no lo estuvo”, completó.