Un gran partido y la condena de dos goles en contra


Fue muy dura la derrota que sufrió Lanús pasada la medianoche, porque había hecho todo el gasto, porque había jugado un muy buen partido y porque le había ganado 3 a 2 a Atlético Mineiro en el tiempo regular con un gol a los 93 minutos de Lautaro Acosta. Pero por la derrota en el encuentro de ida hubo que disputar 30 minutos más, y en el alargue el Granate vio como sus sueños se desmoronaban con dos goles en contra, el segundo de fábula, anotado por Víctor Ayala, quien había establecido el 1 a 1 parcial.

Todo lo muy bueno que hizo Lanús en Belo Horizonte, en el mismo estadio donde hace poco y por el Mundial de Alemania aplastó a Brasil 7 a 1, quedó hipotecado por su mal partido de local. En la final de ida, el equipo dirigido por Guillermo Barros Schelotto había jugado muy por debajo de sus posibilidades y el 0-1 con el que viajó a suelo brasileño fue una pesada deuda que no logró saldar. Así, la Recopa Sudamericana quedó en manos de Atlético Mineiro.

Cinco goles antes de la prórroga

El partido había arrancado muy complicado para Lanús, porque a poco de iniciado ya caía 1- a 0 con un gol de Diego Tardelli, convertido con un penal que dejó muchas más dudas que certezas. Pero Lanús se recompuso a esa desventaja, que se sumaba a la que había llevado desde Buenos Aires, y dio vuelta el marcador con tantos de Víctor Ayala y Santiago Silva. Pero el Granate no se pudo ir al descanso en ventaja porque Maicosuel restableció el empate.

En el segundo tiempo Lanús se lanzó contra el arco rival, no dejó de buscar por todas las vías que le eran posible. Luego de chocar una y otra vez con la resistencia del equipo local, el premio llegó a los 93 minutos. Lautaro Acosta marcó el tercer gol del equipo sureño con la suela de uno de sus botines luego de un cabezazo de Silva.

El alargue

En la prórroga, Lanús quedó condenado por sus propios errores. Fue un hecho histórico, proque si bien es una rareza que un equipo se convierta dos goles en contra en un mismo partido, no registraba antecedentes la circunstancia de dos tantos en el propio arco en el alargue. Primero Gustavo Gómez, a los 12 minutos, y luego Ayala de manera increíble, a los 22, sentenciaron la suerte del Granate, que no pudo conseguir su tercer título internacional.