En tanto, advirtió que "el país entrará de manera inminente en mora" resaltando que hoy fue el último día de gracia para que el país pagara a los bonistas que ingresaron a los canjes de 2005 y 2010.
El mediador consideró que la cesación de pagos no se trata de una mera condición de "default técnico" sino un hecho real y doloroso que le hará daño a personas reales: los ciudadanos argentinos; los tenedores reestructurados que no recibirán el pago de sus intereses; y los holdouts, que no recibirán el pago 1.330 millones fijados por el fallo del juez norteamericano Thomas Griesa.
Al respecto, el minsitro de Economía, Axel Kicillof, indicó verse "ingratamente sorprendido", y criticó que el comuicado de Pollack "parece escrito para favorecer a una de las partes".