La presidenta chilena, Michelle Bachelet, inició hoy su último día de mandato rompiendo el protocolo y saliendo a caminar por el barrio de Las Condes, poco antes de viajar a Valparaíso, donde pondrá en funciones a su sucesor, Sebastián Piñera.
El mandatario electo, por su parte, pasó la mañana en el palacio Cerro Castillo, en Viña del Mar, a la espera de viajar a Valparaíso, donde se encuentra el Congreso chileno, y luego de ser investido como nuevo presidente visitará el pueblo de Constitución, 350 kilómetros al sur de Santiago, uno de los más afectados por el terremoto del 27 de febrero último.
Bachelet, quien deja el gobierno con una imagen positiva inédita de 84 por ciento, salió esta mañana caminando de su residencia en Las Condes, recorrió algunas calles y conversó con los vecinos.
Luego se trasladó al palacio de La Moneda, la sede del gobierno en Santiago, donde se reunió un millar de personas, principalmente mujeres, que coreaban "vivas" y exhibían pancartas con leyendas de agradecimiento y banderas chilenas y del partido socialista, al que pertenece Bachelet.
"Bachelet, presidenta de Chile y de la gente", decía una pancarta, mientras manifestantes repartían pequeñas fotografías de la mandataria firmadas por ella con la leyenda "con mucho cariño, Michelle Bachelet".
Bachelet y Piñera se encontrarán pasadas las 11 en el Parlamento chileno, donde frente a la Asamblea Legislativa se realizará la ceremonia de traspaso de mando, a la que asistirán diversos presidentes y representantes de países extranjeros. Luego de los actos protocolares habituales, el flamante presidente chileno viajará esta misma tarde a Constitución, para ofrecer su apoyo y solidaridad a los habitantes más castigados por el terremoto.