Vecinos lograron la clausura de una antena que estaba “camuflada”


Un grupo de vecinos del barrio Don Orione y de Claypole se unieron par reclamar que se desmantele una antena de telefonía celular que está emplazada en un predio ubicado en la intersección de la calle Don Orione y la venida Lacaze y lograron que se clausure. La particularidad es que la torre funcionó más de dos meses sin la gente la advierta, porque estaba “camuflada” como un tanque de agua.

Luego del sostenido reclamo de los habitantes del barrio y en diálogo con Info Región desde el área de Medio Ambiente de la Municipalidad de Almirante Brown confirmaron que el artefacto fue clausurado.

“La antena fue clausurada hoy, pero empresa ya estaba intimada. Hoy las compañías las camuflan para minimizar el impacto visual, es un nuevo mecanismo de las empresas”, señalaron fuentes de la comuna.

En el barrio, en tanto, las quejas y la exigencia de que se tomen medidas habían comenzado en febrero. En ese entonces, el secretario de Gobierno, Julio Casavelos había asegurado que el Municipio había ordenado la clausura y había intimado a la empresa, porque el artefacto “no tenía, no tiene ni tendrá habilitación”.

Los vecinos explicaron que tener una antena del barrio implica un “temor” por los supuestos efectos de contaminación que generarían las ondas electromagnéticas.

“Hay mamás con chicos enfermos, no por la antena, pero con esto se les suma un problema más”, argumento ante este medio Juan Vegué, miembro de la Junta Vecinal de Claypole (JUVECLA) y del Foro Hídrico local.

El hombre, como portavoz del grupo, también se quejó por el modo “silencioso” en que se instaló al aparato.

“Esa antena la detectamos hace más de dos meses. Ago que nos ha llamado mucho la atención es que si bien es indiscutido el nivel de contaminación que pude producir tal o cual antena, nos parece una grave falta de respeto que la dibujen, porque a esta la camuflaron”, apuntó.

En la zona ya hay antecedentes de instalaciones similares que aún siguen funcionando pese al desacuerdo vecinal.

“Los vecinos reaccionaron porque es un tema muy conocido el impacto que pueden tener, los que están trayendo otras antenas, por ejemplo del otro lado del puente (de Claypole) hay tres más, dos emisoras y una receptora, mucho más grandes que estas que están encubiertas”, señaló Vegué, que anticipó que no cesarán en su reclamo y en la vigilancia hasta lograr el objetivo mayor, que es el desarme del artefacto.

“Lo que pasa es que los vecinos no terminamos nunca de saber si están funcionando o no, por eso pedimos el desmantelamiento. Estamos en contra de las antenas y realmente no sabemos la potencia que tienen porque es difícil de comprobar el grado de contaminación”, indicó.

“Estamos trabajando con gente otros distritos porque a nivel Conurbano hay muchos que se están moviendo preocupadas por el impacto en la salud que pude tener esto”, señaló el representante vecinal. En Remedios de Escalada, la semana pasada, los vecinos de la calle José Ingenieros al 5100 comenzaron una campaña similar.