Los vecinos de Temperley Este agrupados en la asamblea Basta de Inundaciones se volvieron a reunir este fin de semana para reiterar el reclamo que los convoca desde hace más de un año: la construcción del aliviador del arroyo Galíndez, la obra que consideran como la única solución a los problemas que los aquejan cada vez que llueve en grandes cantidades.
Sin embargo, a casi dos meses de haberse reunido con funcionarios municipales, aún no obtuvieron respuestas favorables lo que acrecienta el malestar de la asamblea.
Sólo participaron algunos vecinos pero esta vez no vino nadie del municipio ni tampoco los concejales, a pesar que algunos de ellos están afectados por este problema, se quejó una de las integrantes del grupo, Bárbara Tarillo Egner, en declaraciones a Info Región tras el encuentro del sábado.
En la misma línea, reclamó que tampoco se están cumpliendo otras obras anexas que son necesarias en la zona de Temperley Este, lo cual empeora la situación actual.
En cuanto a los sumideros que se iban a licitar en julio pero no hubo novedades porque no hay ninguna partida presupuestaria, así que tampoco se van a iniciar. Además tenían que empezar a hacer el asfalto en la avenida 14 de Julio, pero todavía no llegó el dinero, así que seguimos esperando, puntualizó.
Por otro lado, si bien hubo poca participación en la reunión del sábado consideraron como otra vía de reclamo la posibilidad de llevar su pedido al Concejo Deliberante.
Vamos a ver si podemos asistir a alguna sesión para plantear el tema porque de las obras que quedan por hacer en Lomas, esta es una de las más importantes porque podría poner fin a las inundaciones de más de 50 manzanas en Temperley y de varios lugares más del distrito, evaluó.
Frente a esta situación, desde la asamblea recalcaron que es necesario que los vecinos se sigan sumando al pedido y que se mantengan en él pese a que se realicen paliativos y parches.
Vamos a ver cómo hacer para que la gente se involucre más. Tenemos que tratar de cambiar la mentalidad porque hay algunos que creen que con los sumideros no se va a inundar más y eso no es así, apuntó.
Ante la falta de avances y a la espera de novedades, la próxima reunión de los miembros de la asamblea se realizará dentro de dos meses, el 17 de septiembre.
Pese a las negativas, vamos a seguir reclamando. No vamos a bajar los brazos, completó Tarillo Egner.