Ordenan no operar los aviones Mirage tras la muerte de un piloto


A raíz de la muerte de un piloto de la Fuerza Aérea que ayer se estrelló con un Mirage durante una exhibición en Tandil, la ministra de Defensa, Nilda Garré, ordenó que se dejará de operar estas naves en forma preventiva hasta que se sepan las causas de este accidente. El siniestro ocurrió ayer aproximadamente a las 11, en el marco de la celebración del 25 aniversario del Bautismo de Fuego de la Fuerza Aérea, en la sexta Brigada, con sede en el partido bonaerense de Tandil, cuando un Mirage M3 cayó a tierra durante una exhibición.

El piloto fue identificado como el primer teniente Marcos Peretti, de 28 años, oriundo de San Francisco, Córdoba, que había efectuado dos pasadas rasantes, pero cuando se preparaba para el aterrizaje la máquina cayó a tierra a un kilómetro de donde se realizaba el acto.

Garré afirmó que, en forma preventiva, "los aviones Mirage dejarán de operar hasta tanto no se conozcan las causas de este accidente" y manifestó estar "conmovida y dolorida" por este hecho, "en el que perdió la vida un joven oficial".

La ministra hizo estas declaraciones durante la ceremonia central del 25 aniversario del bautismo de fuego del arma, en la brigada Aérea de Morón. La titular de Defensa destacó que el piloto "se comunicaba normalmente con la torre de control, pero algo muy repentino debió haberle ocurrido para no poder siquiera eyectarse" y remarcó que "las condiciones meteorológicas eran normales y el piloto no comunicó ningún problema a la torre de control".

Por su parte el comodoro Jorge Alberto Menaier, jefe de la Brigada Aérea de Tandil, dijo a la prensa que "cuando el avión iba a aterrizar, sin mediar ninguna comunicación vemos la explosión y al llegar constatamos que se trataba del interceptor Mirage".

El militar dijo sentirse "desconcertado" porque el piloto no haya tratado de eyectarse ante la inminencia de accidente y aseguró que "quizás que el primer teniente se vio sorprendido, teniendo en cuenta que el avión viajaba a unos 350 kilómetros por hora al momento del impacto". El accidente ocurrió mientras se realizaba un minuto de silencio en memoria de los pilotos caídos en la guerra de Malvinas, tras el discurso del comodoro Menaier y la invocación religiosa del capellán militar, presbítero Héctor Baiza.

Según testigos del hecho el piloto, luego de hacer la segunda pasada por el lugar del acto, viró hacia la izquierda y rápidamente empezó a posicionarse de sur a norte cruzando la pista para iniciar el plan de aterrizaje. Tras consultar a la torre de control, y mientras aguardaba la notificación de los parámetros de combustibles para el aterrizaje, el Mirage desapareció de la vista de la gente, detrás de una espesa nube.

Luego se escuchó una explosión y al concurrir las autoridades al lugar divisaron a la aeronave envuelta en llamas, a varios metros de la cabecera norte de la pista. Menaier, al ser consultado sobre las versiones que apuntaban a un banco de nubes "muy bajo" como posible causa del accidente, indicó que al momento del despegue "las nubes estaban a unos 5.000 pies, y si bien el techo había bajado un poco al momento del siniestro, las condiciones para el vuelo seguían siendo aptas".

El titular de la sexta Brigada Aérea aclaró que "no se puede hablar de un desperfecto mecánico, ya que todos los aviones están en servicio operativo para el vuelo".

En tanto, la Fuerza Aérea informó oficialmente que el piloto a cargo de la aeronave "dirigió el avión hacia un descampado, para evitar con esta heroica acción mayores daños" y que en este intento "el piloto no pudo eyectarse y perdió la vida".

El mayor Alejandro Argañaraz, vocero de la Fuerza Aérea, manifestó que todavía "es muy prematuro hablar sobre las causas del accidente, ya que estamos muy encima del siniestro y todo lo que se diga son conjeturas".

No obstante, indicó que en principio todo indica que hubo "una falla del avión, aunque hay que esperar el informe de la Junta de Accidentes", y remarcó que el primer teniente Peretti "era un piloto especialmente adiestrado para manejar este tipo de aviones caza".

Los aviones caza Mirage fueron adquiridos por la Fuerza Aérea entre 1977 y 1978, pero "periódicamente se le efectúan controles y chequeos para potenciar su rendimiento", destacó Argañaraz. El Mirage M3 está catalogado en la jerga militar como "interceptor de defensa", puede alcanzar los 2.200 kilómetros por hora y es considerado el avión de combate de mayor éxito fabricado en Europa Occidental, por su simplicidad, confiabilidad y alto desempeño.

La ministra de Defensa, Nilda Garré, presidió ayer por la tarde el acto de conmemoración por los 25 años del bautismo de fuego de la Fuerza Aérea, el 1 de mayo de 1982 en Malvinas. Ese día las fuerzas inglesas iniciaron bombardeos, primero con aviones y después con tres buques que se acercaron a Puerto Argentino, dentro de un plan destinado a desembarcar en las islas y presionar la rendición de las tropas argentinas.

La ministra Garré llegó pasadas las 16 a las instalaciones del Instituto Nacional de Aviación Civil (INAC) en la localidad bonaerense de Morón, donde fue recibida por el Jefe de la Fuerza Aérea, Brigadier General Normando Costantino y el Director del INAC, Gustavo Aguirre Faget. También asistieron al acto, entre otros, el Jefe del Estado Mayor Conjunto, Brigadier Jorge Alberto Chevalier; el Jefe del Ejército, Roberto Bendini; el de la Armada, Jorge Godoy, y el intendente de Morón, Martín Sabatella. Sobre un vehículo Hummer y junto al titular de la Fuerza y al director de INAC, la ministra Garré paso revista a los efectivos, tras lo cual saludó a la Agrupación "Bautismo de Fuego de la Fuerza Aérea".

Más tarde, y tras la entonación del Himno Nacional, el Jefe de la Fuerza Aérea pronunció un discurso en el que destacó el "profesionalismo", "la valentía" y "las dificultades" que tuvo que enfrentar la Fuerza que dirige durante el conflicto bélico en el Atlántico Sur.

"En la madrugada del 1 de Mayo de 1982, la Fuerza Aérea Argentina tuvo su bautismo de fuego ante una de las más fogeadas fuerzas armadas de occidente", subrayó Costantino. Y agregó: "Nos enfrentábamos a un oponente tecnológicamente superior, no importó nuestro adiestramiento de entonces, no contemplaba gran parte de las operaciones que tuvimos que llevar a cabo".

Costantino destacó que el "ejemplar" comportamiento de la Fuerza Aérea durante la guerra sorprendió a los ingleses. En su discurso, Costantino rindió homenaje a todos los hombres que ofrendaron su vida en el conflicto del Atlántico Sur y "muy particularmente a los hombres de nuestra Fuerza quienes dieron un ejemplo de decisión, valentía y amor a la Patria".

En un aparte de su discurso, el Brigadier expresó el "dolor de la Fuerza Aérea" por la muerte del Teniente Primero, Marcos Peretti, quien esta mañana se estrelló en la localidad de Tandil.

Por último y dirigiéndose a la ministra Garré, el Brigadier agradeció "el proceso de recuperación de material" iniciado por el Ministerio de Defensa. Tras el discurso de Costantino y para finalizar el acto, se dio lugar a un desfile terrestre y aéreo que incluyó, entre otros, aviones "Pucará", "Hércules C-130" , helicópteros "Bell 212" y aviones civiles.