Luego del derrame de combustible, piden que la autoridad de Cuenca se retire de la zona


Los trabajos en la Cuenca Matanza-Riachuelo siguen provocando repercusiones entre los vecinos y grupos ambientalistas de Esteban Echeverría, que no admiten fallas en el saneamiento porque según ellos, ocasionarán la muerte de varias especies autóctonas y seguirán perjudicando a los residentes en zonas aledañas, así como a la población en general. Luego del derrame de 20 mil litros de combustible mientras trabajaban en la limpieza de la Cuenca a la altura del barrio 9 de Abril de Esteban Echeverría, los vecinos volvieron a intensificar sus reclamos.

“Queremos que se vayan porque están perjudicando más de lo que solucionan”, aseguró a Info Región Gabriela Yeras, de la agrupación ambientalista de vecinos aledaños al Centro Atómico de Ezeiza y agregó: “Ya hay varias especies de pájaros que se están perdiendo porque arrojan insecticidas para la limpieza aunque no previenen que están contaminando sino realizan un previo estudio de impacto ambiental a cargo de algún biólogo”.

Por su parte, Beatriz Vera, del barrio San Carlos, aseguró que están siendo víctimas de la desidia de los municipios y de las irregularidades que se observan desde Nación. “Vamos a seguir reclamando porque estamos tomando agua contaminada y no tenemos cloacas y las fallas en la cuenca provocan fallas negativas en el ambiente”, sostuvo.

A raíz de los reclamos se presentó un pedido de informes en la Cámara de Diputados en el que se solicita el estudio de impacto ambiental y se denuncia un profundo desconocimiento de la zona.

Según el informe presentado, se exige una realización de obras con la declaración del impacto ambiental porque, como aseguraron los vecinos, el personal que trabajó en la zona “no sabía cuál era el recorrido de los conductos de combustibles y gas y no utilizaban mapas”, consideraron los ambientalistas una vez producido el derrame porque rompieron un caño de nafta común con una máquina excavadora cuando estaban trabajando en la Cuneca.

“¿Cómo es que no tenían un mapa de los caños que pasan por la zona del río, no tendrían que tener un mapeo de todos los caños de combustible, de gas, y de todo lo que puede atravesar el terreno?", se preguntaba Yerás que también agregó: "Tendrían que haber hecho un estudio de impacto ambiental y social y como no lo están haciendo nosotros le vamos a pedir a la secretaría de Medio Ambiente de la Nación, a la autoridad de cuenca y a los que realizan estos desastres (no naturales sino provocados), que se retiren del lugar y que suspendan las actividades. Que no prosigan con ninguna de las obras y que remedien todo este desastre porque vemos que ni siquiera atienden a la población afectada”. Además siguen luchando por la evaluación de la contaminación del río, de las napas de agua y de la tierra y que realicen un relevamiento de la fauna que pudo ser afectada luego del derrame de combustible.